1. Con mi suegra y con mi cuñada


    Fecha: 23/10/2018, Categorías: Incesto Autor: Juan8087, Fuente: CuentoRelatos

    ... cogiera por delante, me la chupó hasta que estuvo a punto, se colocó con las piernas abiertas recostada de la pared y la penetro, así duramos un buen tiempo, otros orgasmos, pero en el momento que la giro para colocarla en cuatro, estaba observando mi cuñada en el arco de la cocina. Nos miraba seria y al parecer tenía rato mirando. Lo primero que se me viene a la mente era el problemón que se avecinaba, no sé por cual razón, en lugar de asustarme y saltar a cubrirme, seguí dándole cintura a mi suegra, la madre de mi esposa no sé si por shock no hablaba ni se despegaba, sólo esperamos a que mi cuñada dijera algo. Fueron unos minutos eternos, yo seguía con mi pene erecto dentro de la vagina de mi suegra, hasta que por fin empezó a hablar, diciendo que éramos unos descarados, que tenía rato viendo y nosotros ni cuenta nos dimos de su presencia, que si en lugar de ella hubiese sido mi esposa, quien escribe seguía dándole caña a la suegra, la hermana de mi esposa seguía hablando y reprendiéndonos, mi suegra recobrando el control le dijo, si tienes tiempo espiando debes estar al tanto de lo que su madre necesitaba y que si mi esposa me atendiera bien nada de esto hubiese pasado, argumento para mi rebuscado, y la suegra continuó diciéndole a su hija, que si no le hubiese gustado se habría retirado o armado un escándalo, no quedándose a ver. Mi cuñada quedó descolocada hasta que dijo, ciertamente también tenía cierta curiosidad también, su esposo si bien tenia juventud carecía de ...
    ... ciertas experiencias. Su mamá le hizo la invitación o que si sentía algo de vergüenza ella se retiraba y nos dejaba solos. Ella estaba satisfecha con el tratamiento hecho por mí, algo pensativa la hermana de mi esposa se decide y le dice que cambien de posición, ella se quedaba conmigo y mi suegra podía observar sin participar. Mi cuñada vestía una bata de dormir, no tenía sostén y sólo una tanga pequeña debajo de su vestimenta, no lo podía creer, era surrealista, apenas se la saqué a mi suegra, la hermana menor de mi esposa se la introdujo en la boca, mamó y chupo con golosidad, yo le tocaba los senos, le acariciaba la espalda, decidimos irnos al cuarto para estar más cómodo, le abrí los labios de la vagina y le hice una buena mamada, alcanzó varios orgasmos, la penetre por la vagina, estuve bombeando por un buen tiempo, lo hicimos en varias posiciones, de momento mi suegra me hablaba que cuando repitiéramos hiciéramos lo mismo que hacía con su hija, yo decía estaba en el paraíso, no había aguantado tanto para correrme jamás como en ese momento, todos estábamos disfrutando a lo grande, sin planificar, de manera inesperada. Mi cuñada jadeaba, gemía, pero no hablaba como lo hizo su madre, igualmente lo gozaba, la coloco con las piernas hacia arriba a la altura de mi hombros, así arremetía con fuerza, hasta que mi suegra intervino y la retó a que practicara el sexo anal, ella aceptó y le estrené su culito, al igual que mi suegra lo gozó bastante, los tres quedamos satisfecho. ...