1. MI PRIMER ORGASMO FUE CON MI PRIMITA 4


    Fecha: 25/10/2018, Categorías: Incesto Autor: misterchuy1, Fuente: SexoSinTabues

    ... fuerte empujón y mi miembro completo se le fué hasta adentro de su coñito, que parecía un horno hirviente y que me volvió totalmente loco de pasión. yo la bombeaba con fuerza y a la vez con ternura y ella se movía al encuentro de las estocadas de mi espada viril, y, aunque era virgencita, no emitió ni siquiera una queja, sino que disfrutaba como yo de sentirse totalmente llena de mi tolete, gimiendo y sollozando de pasión, hasta que un segundo orgasmo la hizo estremecer nuevamente, viniendose en mi verga, de tal manera, que me provocó que yo tambien le soltara un verdadero río de leche hirviente, que al mezclarse con su venida, inundó cada pliegue de su recién desflorada cueva de amor, hasta desbordarse por las orillas de su recién desflorada vagina. aunque me vacié totalmente dentro de ella, mi falo no perdió su dureza, y cuando nos recuperamos, sin sacársela, me dí la vuelta y la monté encima de mi. ella trató de moverse, pero por su falta de experiencia, lo hacía torpemente; la tomé de las caderas y la fui guiando en el movimiento, le dije que pusiera sus manos en mi pecho para equilibrarse; en pocos minutos aprendió y comenzó con movimientos lentos, que se fueron acelerando poco a poco. yo sentía como su vagina, recién estrenada, apretaba mi verga suavemente y nuevamente me hacía enloquecer con el intenso calor que emanaba de ella, pues debo decirles, que ni antes ni después de ella, había sentido una vagina con un calor interno tan intenso; me quemaba su intensidad y me ...
    ... provocaba enterrarle mi tolete con furia y a la vez su inocencia me provocaba ternura, que me hacía desear seguir cogiendo con ella toda la noche. sin soltarla, y aún dentro de ella, me senté y la abracé con fuerza; ella se inclinó para iniciar una deliciosa sesión de besos; cuando terminó, mis labios quedaron a la altura de sus senos, y yo empecé a chupar sus rosados pezones, con verdadera delicia, mientras ella se clavaba en mi estaca una y otra vez, hasta que sentí como se derramaba nuevamente, experimentando otro orgasmo, que casi le provocó un desmayo, dejándose caer encima de mi. permanecimos abrazados unos momentos, yo me salí de ella, viendo salir mi propio semen de su vagina, mezclado con su venida y algunos hilitos de sangre, últimos restos de su recién perdida virginidad. la acosté boca abajo, me puse atrás de ella y la hice que levantara su cadera de tal modo que su delicioso trasero quedó totalmente al aire y expuesto a mi capricho; en ese momento tuve el deseo de desflorarle también su esfínter anal, pero pensé que para eso habría otras oportunidades (y vaya que las hubo). en esos momentos lo que mas deseaba era seguir perforando ese ardiente coñito, que era mío por primera vez. al ver semejante espectáculo, mi verga se volvió a parar totalmente y la posicioné una vez más a la entrada de su vagina, metiéndosela de un solo empujón; yo solo escuché como volvió a gemir de placer, enterrando su deditos en las sábanas y empujando sus caderas al encuentro de las mías, ...