1. La Despedida de Soltero de Víctor


    Fecha: 02/11/2018, Categorías: Anal Sexo con Maduras Sexo en Grupo Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... mientras me cogían por el culo. En realidad, todavía tenía enterrada la verga bien endurecida de Víctor en mi concha y podía sentir que todavía latía, descargando de a poco más semen en mi vagina...Pablo aulló de placer y descargó toda su leche dentro de mi ahora bien dilatado culo.Después de ello sus amigos me levantaron en andas y me arrojaron sobre nuestra propia cama, me pusieron boca arriba y uno de ellos me cogió con furia, mis tobillos sobre sus hombros, mientras otros dos me ponían sus vergas al alcance de mi boca.Así estuve hasta que amaneció, recibiendo semen de los amigotes de mi futuro marido en todos mis orificios y cavidades, mientras él seguía maniatado y vendado sin poder participar. Seguramente el turro estaría pensando que me había metido los cuernos por última vez con una prostituta experimentada, pero nunca se habrá imaginado que sus amigos iban a cogerse a su futura mujercita frente a él, en su propia cama y que jamás iba a enterarse.Ni yo misma podía creer lo que había hecho esa noche, actuando como una verdadera puta, pero realmente lo había disfrutado muchísimo.“Nunca había conocido una perra tan viciosa, seguro que no la atienden bien…”Decía uno de los amigos, mientras me ...
    ... aplastaba contra la cama con su verga enterrada a fondo.“Víctor, esta trola hasta tiene un aire a tu futura esposa” Dijo uno de los más atrevidos, mientras yo le chupaba la pija y descargaba su semen caliente en mi boca...“Seguro tu novia está cogiendo con algún stripper en este momento” Comentó otro, mientras esperaba su turno masajeándose la verga.Cuando todos estuvieron satisfechos me levanté de la cama, me limpié los restos de semen como pude y me fui sin que Víctor pudiera verme.Una de mis amigas me recibió en su departamento; disfruté de un buen baño de inmersión y me masturbé recordando todas las pijas que me habían cogido. Luego disfruté ver el amanecer en brazos de mi amiga, que me lamió mi concha bien usada y abusada como solamente una mujer sabe hacerlo…Me imaginé entonces que había sido ella la que me había provocado ese orgasmo bajo la mesa mientras mirábamos a los strippers…Por supuesto me casé con Víctor una semana después. Jamás le dije nada ni tampoco sus amigos se atrevieron a hacerlo.Durante los años que vivimos en Buenos Aires, algunos de ellos me manoseaban la cola a escondidas cada vez que nos reuníamos y me proponían susurrando en mis oídos toda clase de barbaridades posibles… 
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