1. Con toda su juventud, se muere por los maduros


    Fecha: 05/11/2018, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Mientras íbamos caminando me contaba sus debilidades. La verdad que se ven caras pero no corazones, y nunca mejor dicho. Soy un hombre argentino, me llamo Eduardo, tengo 50 años, hago bastante deporte y me conservo bastante bien, vivo con una chica Venezolana, hace dos años. Siempre me pedía que traiga a su hija con nosotros, ya que haya la cosa esta muy jodida, hasta que logramos traerla. Cuando fuimos a buscarla al aeropuerto de Barajas y la veo, nadie le daba la edad que tiene, parece de 15 años y no de 19 como tiene. Pequeña de estatura, delgada, con cara de niña inocente, madre e hija se abrazan, se besan, llanto de emoción, nos saludamos con Luisa, que así se llama la chica, y nos fuimos a casa. Al otro día, su madre y yo siempre salimos a caminar, andamos mucho, y la invitamos, en la caminata madre e hija no dejaban de hablar y hablar, hicimos todo el trayecto hasta volver a casa, nos duchamos y pasamos el día sin novedad. Cuando salíamos a caminar, Luisa se empezó a poner un pantalón corto, ajustado, una camiseta liviana de hilo, ya que hace mucho calor donde vivimos. Cruzando por un monte de pinos, a Luisa le vinieron ganas de orinar, se puso contra uno de los pinos y ahí hizo lo que tuvo que hacer y seguimos, pero lo que me llamo la atención, fue que no se ocultó mucho de mi mirada, dejando que le vea su culito blanco, de nalgas redondas y bien paradas, mientras su madre orinaba un poco mas adentro del monte, pensé que no se había dado cuenta y no le dí ...
    ... importancia. Así fuimos saliendo y siempre ella con la escusa de orinar me dejaba que le vea el culo, eso me empezó a llamar la atención, pero la dejaba. El viernes a la noche mi mujer estaba con mucha diarrea, muy mal del estómago, el sábado a la mañana cuando nos íbamos, ella seguía mal y no quiso ir con nosotros, le dijimos de quedarnos pero ella insistió en saliéramos y nos fuimos. Íbamos hablando y me dijo que había dejado a su novio en su país por venir con nosotros, pero el novio era dos años menor que yo, "te gustan los maduros", le dije, caminando a su lado, "si, son mejor que los chicos de mi edad, que solo quieren cachar y nada mas", me decía, "pero tu novio también querría coger, me imagino", le dije, "si, cachábamos, pero siempre se preocupo por hacerme gozar, con todos los maduros que estuve siempre llegue al orgasmo, y con los chicos siempre me quedé a medias", me seguía diciendo, " y cogiste con muchos?", seguíamos hablando, "con varios, mi tío me inició a los 14 años", me confesaba, "tu tío?", le dije incrédulo, "y tu madre sabe?", le pregunté, "no, no sabe nada", me decía, "no tenés ganas de hacer pis?", le dije, "no, por que?", me dijo mirándome sorprendida, "quiero verte ese culito hermoso", le dije, apretando sus nalgas con mis manos, "hay Eduardo, no seas mano larga", me dijo riendo, corriendo unos pasos delante mío, riendo, "dale, mostráme ese culito hermoso", le dije, volviendo a meter mi mano entre sus nalgas, y ella volvió a hacer lo mismo riendo, "mano larga", ...
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