1. Parte 1. Sexo duro con mi amigo.


    Fecha: 07/11/2018, Categorías: Transexuales Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... Al final solo me dejo la tanga, de pronto hizo la tanga asía un lado y sentí que me empezó a poner saliva en el ano. Yo estaba ardiendo ya quería que me la metiera, pero él seguía lubricando mi ano con saliva, sus dedos en mi ano, me asían explotar, mi corazón latía muy fuerte y me sentía muy agitado, tardo un muy buen rato, tomaba saliva de su boca y la ponía en mi ano una y otra vez, pensé que nunca me penetraría, en una de esas dejo de tocar mi ano, pensé que iba a tomar un poco de saliva, cuando de repente sin avisar me metió ese gigante pene por completo, hasta dentro, todo, por lo que no pude aguantar y grite: Mario: ¡Espérate Aaaah! Era un verdadero monstruo, sentía su respiración cerca de mi oído. Pablo sabía que no estaba dormido. Así que me volvió a dar otra envestida y volví a gritar. Mario: ¡Aaaaaah que rico! Pablo: Pues no que estabas dormido cabrón, ahora te vas a tener que aguantar. Estábamos de cucharita, él tenía un pie arriba de mí, parecía que estaba enojado, me empezó a coger con más fuerza, me jalaba de los pelos y me decía en el oído Pablo: te voy hacer mi perra, no querías que trajera viejas ahora me voy a desquitar contigo. Yo lo provocaba para que me cogiera con más fuerza. Mario: Eso es todo lo que tienes ni se siente nada. Pablo: Así NO LE HUBIERA DICHO, me abrazo con sus fuertes brazos y me jalaba con un tremendo vigor asía su cuerpo y la metía muy duro yo solo gritaba. Mario: ¡Aaaaaa¡ ¡Aaaa! ¡Aaaa! Después me voltio y me puso de perrito. Ese ...
    ... pene era gigantesco, cada que lo sacaba y lo volvía a meter me habría mi pequeño y apretadito ano, y me hacía pegar unos tremendos gritos. Me lo volvió a meter tomando mucho impulso Mario: ¡Aaaaaaaaa! Pablo: Aquí nadie te va escuchar, nadie te va a poder salvar. En esa posición metió sus manos por debajo de mis axilas, tomándome de los hombros, y me jalaba contra él, yo solo sentía esas grandiosas envestidas, parecía un animal que tenía mucho tiempo sin coger, me cogía muy duro y no se cansaba, yo estaba muy excitada, por cómo me cogía, de pronto sentí unos dulces besos en mi espalda, pasando por toda la columna y terminaba en mi oído diciéndome cosas sucias, mi pene estaba muy duro. De pronto me levanto y me pego junto a su pecho, estábamos hincados, yo un poco arriba de el por qué me tenía ensartada en esa suculenta verga, y me besaba toda, yo me sentía una hermosa mujer por cómo me tocaba. Después de un rato me la saco dijo que sentía que se iba a venir, por lo que me agarro de los pelos y me hizo que se la chupara. Ya cuando se calmó, me acostó boca arriba, levanto mis pies pegándola a sus hombros y echo su peso sobre mí, mi culito se levantó, pero parecía que no encontraba mi agujerito, en la misma posición en la que estábamos me tomo de mis tobillos y echo mis pies hasta la cabeza, estaba con todo el culo parado, nunca imaginé lo que iba a pasar, cuando metió ese enorme cabeza de nuevo, sentí como entro el aire en mis pulmones y lo saque en forma de suspiro, mi pene soltó ...