1. El mecánico y su amigo enfiestan a Anita


    Fecha: 24/11/2018, Categorías: Anal Sexo con Maduras Voyerismo Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    El mecánico y su amigo enfiestan a AnaComo ya lo había anunciado por la tarde, muy puntualmente apareció Ricardo en la puerta de casa. Mi curiosidad se transformó en desesperación cuando vi quién era su amigo. Se trataba de Marcos, el carnicero del barrio, un bruto como pocos, hosco y ordinario, siempre con una expresión dura en el rostro.Además era un gigante, ni quería imaginarme en proporción el tamaño de su verga.Anita no pareció decepcionada cuando vio quien iba a compartirla, siempre me decía que ese tipo la desnudaba con la mirada cuando iba a su local, aunque nunca le había hecho ningún comentario fuera de lugar. Ahora tendría la oportunidad de cogérsela, gracias a su amistad con el mecánico y hasta podría sodomizarla…Mi amigo parecía divertido, me miró sonriente preguntándome:“Te imaginabas que Marcos iba a terminar cogiéndose a la putita de tu mujer…?”Yo ni siquiera le contesté, viendo que a Ana le brillaban los ojos…Ricardo me preguntó si iba a quedarme para presenciar lo que le harían a mi esposa, o si prefería irme y regresar en unas horas. Le contesté que quería ver todo, recibiendo como respuesta una sonora carcajada de ambos.Anita los precedió camino a nuestra habitación, mientras el mecánico le manoseaba el culo por debajo del vestido y sonreía satisfecho por la ausencia de ropa interior. Sacó sus dedos humedecidos con los jugos de Ana y se los mostró a su amigo.“Te dije que es una flor de puta, ya tiene la conchita chorreando”.Mi esposa permaneció de pie en ...
    ... el centro de la habitación, mientras Ricardo se acercó por detrás para acariciarle los hombros y deslizarle los breteles del vestido, el cual cayó al piso en un segundo, dejándola en toda su esplendorosa desnudez.El bruto del carnicero ni siquiera había dicho palabra, pero ya se estaba desnudando en un rincón. La visión de Ana vestida solamente con sus zapatos de taco aguja y las medias negras de nylon lo hizo excitar bastante, ya que lanzó un silbido mientras se tomaba su enorme verga con ambas manos. Decir enorme es poco, esa pija era mucho más grande todavía que la del mecánico. Si intentaba sodomizar a Anita con eso, seguramente ella iba a terminar en un hospital…Ricardo también se desnudó y le dijo a su amigo que se la cogería a mi esposa en primer lugar, para dejársela un poco más dilatada y lubricada, ya que así podría resistir mejor su gigantesca y dura verga.El tal Marcos asintió con la cabeza y se acercó a mi esposa, que estaba en cuatro patas al borde de la cama. Tomándola por los cabellos la obligó a abrir su delicada boca y le hundió su herramienta ahora un poco fláccida, hasta el fondo de la garganta. Anita se ahogó con esa intrusión, pero enseguida pareció que se acomodaba y comenzaba a succionar y lamer semejante pedazo de verga, que empezó a aumentar de tamaño mientras el carnicero iniciaba un desenfrenado ritmo balanceando sus caderas.Mientras tanto Ricardo había subido a la cama detrás de Ana y ya guiaba su pija hacia los suaves y abiertos labios vaginales, ...
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