La segunda vez con mi tio. - Relatos Eróticos

La segunda vez con mi tio.

Esta historia 100% verídica narra mi segunda vez con mi tío y como pase a ser su putita a mis 9 años. por marcostiento La segunda vez con mi tio. por marcostiento Esta historia 100% verídica narra mi segunda vez con mi tío y como pase a ser su putita a mis 9 años. Un día para ser preciso, al siguiente jueves después de ese sábado que tuve mi primer encuentro con el futuro cuñado de mi madre, van visitarnos mi tía con su novio, para pedirle a mi madre que fuera su madrina de casamiento. Mi madre acepto gustosa y les invito a tomar el te, mi madre y mi tía se fueron a la cocina, dejándome en el comedor con mi tío, fue entonces que el mirándome a los ojos pregunto, Te gusto lo que hicimos la semana pasada?. Me sonroje y mirando para el costado respondí EHH, SI. Una sonrisa se dibujo en su rostro, para luego agregar ¿Te gustaría hacerlo de nuevo?. Levante mis hombros y mordiendo mis labios recordé sus caricias y besos sobre mi piel, para luego responder tímidamente, EHH, NO SE, SI. Después de tomar el té mi tío comento que el sábado tenía que ir a Monterrico a dejar unos papeles en su trabajo y que aprovecharía para entregar unas invitaciones, y le pregunto a mi madre si yo lo podía acompañar. Mi madre mirando a mi tía pregunto si no tendría problemas por mi presencia, a lo que el respondió que no. Está bien dijo mi madre, mientras servía mas te. Bueno, entonces lo paso a buscar a las 10 de la mañana y estaríamos de regreso a las 6 de la tarde, comento mi tío sonriendo. El ...

... sábado llego, mi tío me paso a buscar como acordamos, después de las recomendaciones de mi madre (que me porte bien, que coma todo, y principalmente haga caso), nos subimos al auto, mi tío me puso el cinturón de seguridad, y encendiendo el motor emprendimos el viaje. Habíamos tomado una avenida para salir a la ruta, cuando exclamo ¿Te gustaría hacerlo de nuevo?. NO SE CUANDO? Comente nervioso. Ahora, resulta que conozco un lugar donde nadie nos va a molestar, dijo sonriendo. EHH, BUUEENO, dije mirando el camino. No había pasado mucho tiempo cuando después de una curva vi un cartel con forma de corazón. Doblo a la izquierda y siguiendo un camino de tierra, llegamos a un grupo de casitas, pintadas de rosa. A DONDE ESTAMOS? pregunte curioso. En un telo, dijo mientras metía el auto en pequeño garaje, para después correr una gran cortina de color verde. Nos bajamos, espérame adentro voy a la gerencia, dijo mi tío sonriendo. Entre despacio la pieza era grande con una cama matrimonial con dos mesitas de luz, con cuatro paquetes dorados sobre ella, un televisor, un baño y una camilla media rara. La estaba mirando cuando escuche el ruido de a puerta, me di vuelta y viendo a mi tío dedo pregunte ¿QUE ES?. Eso es una camilla ginecológica, respondió sonriendo. Mi tío me miro a ojos y con una extraña sonrisa dibujada en su rostro, se desnudo por completo. Mis negros ojos recorrieron su desnudo cuerpo, y con su pija erguida como una lanza, se acerco hacia mi. Me tomo por la cintura y ...