1. Desfloré a mi prima


    Fecha: 01/01/2019, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Cuando venía de la universidad decidí pasar a la casa de mis tíos, una casa que desde muy niño había sentido muy, pero muy cerca pues vivían cerca de mi casa y yo practicamente me crié con ellos: mi tío, su esposa y sus tres hijos: N., la mayor; Paola, la de en medio y C. mi primo menor. No era extraño que yo pasara pues aun visitaba muy a menudo a mis primos, claro que ahora había cambiado la relación: loo que antes eran juegos y compartir programas de tele, ahora era tocar guitarra electrica con mi primo y cantar y tocar guitarra con Paola. Ella también había cambiado mucho y siempre me llamaba mucho la atención sus bien formadas piernas, sus pechos que aunque pequeños se apreciaban bien formaditos y su precioso trasero que me hacia desearla mucho. Al llegar a la casa vi que mi tío iba saliendo y yo le dije que no importaba, que pasaba en otro momento. Él me contestó que pasara, que Paola estaba durmiendo pero que la despertara no más. Ël se fue y me abrió la puerta para que yo entrara. Debo confesar que desde el primer momento me excité mucho solo con la idea de que estábamos solos en su casa... así es que subí al segundo piso y entre muy silencioso a su dormitorio... mientras la veía dormir tapada en su cama me iba acordando de una larga e incontable historia de contactos sexuales que ella y yo habíamos tenido desde niños pero que eran casi lo típico entre primos, sólo que esto sucedió desde que yo tenía como 9 años hasta los 18... ahora yo tenía 22 años y ella 19 y hace ...
    ... poco tiempo jugando a luchar un dís le había tomado los pechos y la había besado y ella me había demostrado que le gustaba correspondiendo mi beso con bastante pasión. Todo eso me excitaba mucho así es que casi temblando me acerqué a su cama me tiré en el suelo y le hablé diciéndole que su papá me había encargado que la despertara, ella estaba tapada hasta los hombros con la ropa de la cama, era invierno y hacía un poco de frío, sonrió y me dijo: qué tonto es mi papá!... yo me acerqué jugando y le di un beso, comenzamos a besarnos sin hablar porque sabiamos qué venía pero no sabíamos cómo empezar... yo le dije que hacía mucho frio y que mejor no se levantara, que yo me acostaría con ella pero entre las frazadas y no en las sábanas como ella estaba... acostado con ella empezamos a besarnos y por encima de la ropa de la cama yo podía sentir su cuerpo y comencé a acariciar su cadera y su costado hasta llegar a sus pechos que ella me ofrecía sutilmente empujando el tronco contra mí, su lengua jugaba con la mía, su saliva pegajosa me indicaba que estaba muy excitada, me dijo que me acostara entre las sábanas con ella, yo lo hice y al levantar un poco la ropa pude ver que llevaba puesto solo un peto bastante suelto, como de una polera vieja y unos calzoncitos blancos muy pequeños... Así es que no solo me puse a su lado sino que comencé a acariciar su piel firme y caliente, tocando su vientre y subiendo lentamente hacia su pecho por debajo del peto... esos pechos me volvían loco por ...
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