1. El tutor Sr. López


    Fecha: 06/01/2019, Categorías: Dominación Autor: Juanspanker, Fuente: CuentoRelatos

    ... amoratado, con razón le dolía tanto. No pudo evitar tener un nuevo orgasmo con solo verse el trasero tan colorado y marcado, orgasmo que se apresuró a secar con la toallita de baño. Se quitó las bragas e iba a cambiarse, pero recordó que las de recambio estaban en su maleta. Eso iba a resultar un problema. Entonces alguien llamo a la puerta del servicio, era el conserje. (Conserje).- Señora Pujol, aquí le dejo su maleta. El Sr. López me ha indicado que se la subiera, pues le debe hacer falta algo de ella. Luego déjela en el servicio, yo volveré a por ella, ya que no se la puede llevar. (Laura).- Muchas gracias Sr. Luis, usted siempre tan amable y cordial… Espero un par de minutos a que el conserje se hubiera ido, para salir y coger la maleta. Abrió la puerta y asomo la cabeza, al ver que no había nadie, abrió la puerta y ahí estaba su maleta. Volvió adentro puso la maleta encima de la repisa del lavabo, la abrió y extrajo unas bragas limpias, tenía varias preparadas, unas preciosas de encaje negro, las tuvo en la mano e iba a ponérselas, cuando recordó que a la tarde debía regresar, entonces prefirió coger unas de algodón blancas igual que las que se había quitado, pero estas en cambio llevaba de dibujitos, unas flores de margaritas, se las puso, y entonces recordó que no se las podría volver a cambiar de nuevo, entonces opto por ponerse una compresa absorbente, ya que seguramente se le volverían a mojar de nuevo, y era mejor asegurarse, al tiempo que en el bolsillo interior ...
    ... de la chaqueta, puso un par de compresas más, por si le hicieran falta cambiarse de nuevo. Una vez colocada la compresa se volvió a subir las bragas, no sin volver a sentir aquellos pinchazos de nuevo. Guardo en una bolsa las usadas y sucias, cerró la maleta. Se aliso la falda y mirándose en el espejo una última vez, salió del servicio. Al salir se llevó un sobresalto al encontrarse con que Juan la estaba esperando fuera. Sin mediar palabra alguna, este la inclino bajo su brazo izquierdo y sin esperarlo, su falda fue alzada dejando al descubierto su trasero revestido en unas preciosas braguitas de algodón blancas con unas margaritas. (Sr. López).- Has hecho muy bien en ponerte las bragas adecuadas, hasta la tarde! El Sr. López libero a Laura, la cual ante esa sorpresa inesperada volvía a estar roja de vergüenza. Sin tiempo a reaccionar vio como Juan entraba de nuevo en su despacho, Laura solo pudo hacer que arreglarse de nuevo la falda, una vez recuperada del sobresalto. Con dificultad camino hacia el ascensor, deseaba salir de ese edificio cuanto antes, no deseaba más sobresaltos. Una vez en el rellano en la planta baja, esperaba encontrarse con el conserje. Pero tuvo suerte no se hallaba en él. Se apresuró a salir sujetándose el trasero para poder caminar más rauda hacia la puerta. Antes de cruzar el umbral, se relajó. Y salió al exterior como si nada hubiera sucedido, ahora si veía las mismísimas estrellas al andar, pero no tenía más alternativa que apretar los dientes y ...