1. La pantalla de la computadora


    Fecha: 06/02/2019, Categorías: Anal Sexo en Grupo Sexo con Maduras Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... personalmente con ese chico y para mi sorpresa me respondió que ella quería, si eso me parecía bien a mí…Finalmente, mail de por medio, nos encontramos con Mauricio en un boliche que tenía unos espacios reservados y bastante oscuros…Tomamos unos tragos y conversamos un rato; mientras yo notaba que mi mujercita se moría por probar esa verga que Mauricio le había mostrado por cámara.Ella empezó toqueteándonos un poco a los dos, rozando nuestras pijas por encima de los pantalones. Mauricio se calentó mucho más rápido que yo y zambulló su mano por debajo del vestido de Anita. Ella no se había puesto ropa interior; así que enseguida el chico sacó sus dedos empapados por los fluidos de mi esposa y me los mostró con cara de sorpresa…Ana le dio la espalda y se inclinó hacia mi lado para besarme, ofreciéndole a Mauricio todo el esplendor de su hermoso trasero. El chico entendió el mensaje y volvió a meter sus dedos entre esos humedecidos labios vaginales.En pocos segundos no aguanté más la calentura y me bajé los pantalones para dejar mi pija al alcance de la boca de Anita; que se la metió enseguida entre sus labios rojos y comenzó a darme una tremenda mamada.Mauricio también sacó a relucir su tremenda verga y Ana entonces no lo dudó un segundo; dándose vuelta empezó a chupársela a él…Mientras me deleitaba observando a mi dulce esposa comiéndose esa enorme pija, yo le metía mis dedos bien a fondo, dilatándola y sintiendo el calor y la mojadura de su concha.El chico entonces le ...
    ... preguntó a Ana si la podía coger…Ana le sonrió sin responder y se movió sobre su regazo, dándole la espalda. Luego elevó su cuerpo apoyándose en la mesa y fue descendiendo sobre esa verga erecta, empalándose muy despacio…Mi esposa abrió su boca pero no exhaló ni un solo gemido. Me miró a los ojos mientras se iba empalando sobre esa enorme verga dura como piedra.Me sorprendió que su delicada y estrecha concha aceptara con tanta facilidad ese pedazo de carne; que finalmente desapareció entre sus labios vaginales. Ana comenzó a retorcerse de placer, sin gemir, mientras subía y bajaba sobre la verga de Mauricio.Yo me puse de pie y me acerqué a ella; poniendo mi verga al alcance de su boca. Antes de dejármela dura a lengüetazos, Ana ya había acabado al menos dos veces, en silencio, sin hacer escándalo en ese lugar oscuro, donde se veían otras parejas haciendo lo mismo que nosotros.De repente Ana se incorporó, saliéndose de encima de esa magnífica verga que la estaba cogiendo. Mauricio dejó ir sus manos de las caderas de mi esposa y pareció decepcionado, ya que todavía no había podido acabar. Anita giró su cabeza y le sonrió; para luego aferrar esa verga enorme con una mano y apuntarla a la entrada de su puerta trasera.El pibe puso los ojos en blanco cuando sintió que su tremenda cabeza empezaba a abrirse paso en el estrecho ano de mi sensual esposa.Esta vez Ana abrió su boca y dejó escapar un extraño sonido gutural, mientras la cabeza de esa pija invadía su recto, llenándolo casi por ...