1. La dolorosa isla negra


    Fecha: 12/02/2019, Categorías: BDSM Autor: slocum1, Fuente: xHamster

    ... ternura. Yo siempre había opinado así . Desde niño me excitaron las mujeres en situaciones vulnerables en donde se exaltara su delicadeza , la belleza de sus formas , las situaciones en donde aparecieran como víctimas desprotegidas . Por eso me gustaba provocar esas situaciones de dolor , para posteriormente tener el “PRETEXTO” de derramar mi ternura , de hacerles probar mi consuelo y congoja por ellas .Claudia decía estar de acuerdo con mi postura . Me señalaba que dicha manera de entender la cuestión no era tan extraña como podría pensarse . Yo creí encontrar un alma gemela . Ahora no estoy tan seguro de ello .Antes de cada sesión acordábamos los términos de ella; siempre lo hacíamos así . Ella ponía los límites: lo que no quería sufrir , lo que no estaba dispuesta a soportar y yo me comprometía a respetarlos . En todo caso estaba la fórmula de emergencia , la palabra mágica : STOP .Yo tenía carta blanca para hacer todo lo que se me ocurriera dentro del margen de límites que ella me había puesto . Pero si en el transcurso de la sesión , la dolorosa no se sentía capaz de resistir podía darme el aviso correspondiente , STOP ; sólo ante esa palabra yo me detendría . Esto es , si por ejemplo : la dolorosa estaba siendo azotada y ella me pedía parar el castigo , llorando , implorando desgarradamente ; yo no me detendría sino cuando escuchara de sus labios la fórmula mágica , ¡STOP¡ . Se suponía que los chillidos y lágrimas formarían parte del juego lo que no quería decir que no ...
    ... fueran reales o fingidas . Según ella , lo que más esperaba en la sesión eran mis muestras de cariño y ternura . El dolor valía la pena por las caricias y besitos que traerían como consecuencia . Por eso Claudia me exigía dureza y humillaciones al por mayor durante las sesiones .El primer encuentro fué una sucesión de bofetadas , pellizcos , estrujamiento de tetas y un Spanking contundente , para luego dejarnos llevar por el remanso esperado (de ternura). En la sesiones que siguieron , Claudia pedía dureza en términos crecientes . Siempre más y yo se lo daba . En cada encuentro los quejidos eran mayores y el dolor fué ocupando el lugar principal . Yo , al verla tan doliente cambié mi forma de enfrentar al trabajo de hacerla sufrir. Comencé a dosificar las torturas con muestras de consuelo intercaladas : azotes , luego caricias , pellizcos , luego besos , apretones luego arrumacos …, y así. Estimaba que era una buena forma de que Claudia pudiera absorber el castigo . Pero a ella , estos intermedios de dulzura no le gustaron y prefería seguir con el modelo de las primeras sesiones en que dividíamos el encuentro en 2 partes: la tortura, propiamente dicha y la ternura .Traté de volver al régimen antiguo pero confieso que no pude ; simplemente me era imposible propinar , por un lapso prolongado de tiempo ,dolores tan fuertes . Se lo hice saber y cuando ello ocurrió la mirada de la dolorosa se hizo más inescrutable que nunca . No me habló más y dejamos de encontrarnos .Me sobrevino ...
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