1. La visita nocturna del arquitecto


    Fecha: 24/10/2017, Categorías: Sexo Duro Sexo con Maduras Voyerismo Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    ... mis nalgas y de vez en cuando la empujaba contra mi entrada anal. A esa altura, ya no me importaba nada…Entonces él me giró otra vez boca arriba y comenzó a descender por mi cuerpo usando su habilidosa lengua. Al llegar a mi ombligo, tuve el primer orgasmo, el cual grité a todo pulmón, sin importarme que Víctor pudiera escucharme en medio de su modorra etílica…El hombre comenzó a lamer los costados de mi tanga, haciendo que quedara empapada con mis propios fluidos. Le pedí que me la metiera, ya no quería esperar más por esa verga…Levantó mis piernas y deslizó la tanga a un costado. Yo esperaba que me la metiera, pero él pasó su lengua por encima de mis labios vaginales. Ya no pude aguantar más y tuve un segundo orgasmo, mucho más intenso que el anterior.Cuando dejé de temblar, estiré mis manos y tomé su cabeza, para hundirla sobre mis labios vaginales. Metió su lengua muy adentro de mi concha y siguió chupando mi clítoris.Me sentí morir de placer y le supliqué que lo hiciera un poco más rápido, para poder llegar a mi tercer orgasmo. Mi clítoris estaba muy hinchado y cada vez que él chupaba yo me retorcía de placer.De pronto metió la punta de su lengua en mi entrada anal y eso fue lo que originó mi siguiente orgasmo, acompañado de un gemido intenso. Apreté mis muslos aprisionando su cabeza contra mi concha; le jalé de los cabellos, gritando como loca…Lo hice montar sobre mi cuerpo y abrí mis piernas para que me penetrara. Comenzó a deslizar su verga por encima de mi vagina ...
    ... rozándola suavemente. Mi desesperación por sentirlo adentro era tanta, que entonces lo empujé y me monté sobre él, dejando que esa pija dura se metiera completamente dentro de mi concha…Sentí un gran alivio al tener esa verga cogiéndome y entonces comencé a cabalgar un rato mientras sus manos amasaban mis tetas, logrando que mis pezones dolieran, casi al punto de explotar.En un momento uno de sus dedos se abrió paso en mi estrecha entrada anal y eso provocó el clímax total; ya que pude sentir cómo los dos terminaríamos al mismo tiempo nuestros orgasmos.Nos quedamos tendidos un rato sobre la cama; habíamos estado casi dos horas teniendo sexo con mucha intensidad.Era pasada la medianoche y ese hombre debía regresar a su casa, con su esposa… Nos levantamos y vestimos. Luego él volvió a acariciarme, sin muchas ganas de irse.Lo acompañé a la puerta y la despedida fue un simple beso en la mejilla, señal más que suficiente para que él comprendiera que eso significaba que lo nuestro no había acabado ahí.Al quedar sola me dediqué a un relajante baño de inmersión, para después ir a acostarme junto a mi adorado esposo. Al entrar a la habitación, me encontré con la sorpresa de ver a Víctor con su verga bien parada y sus cinco sentidos a pleno…Enseguida comprendí que había fingido su modorra y ese estado calamitoso, para dejarme a solas con el arquitecto.Me confesó que se había hecho tres pajas mientras me espiaba y me veía acabar cuatro veces en manos de ese hombre. Pensó esperarme, pero ...