1. Celebración familiar


    Fecha: 25/10/2017, Categorías: Sexo con Maduras Sexo en Grupo Sexo Interracial Autor: Femmefatale969, Fuente: xHamster

    Hacia mucho tiempo que no nos juntábamos toda la familia. Mi marido no ha tenido nunca muy buen relación con sus hermanos, y desde la muerte de su madre las cosas habían empeorado. Eran cinco en total, Mayte, la mayor, que vivía en el pueblo y se encargaba de echar un vistazo al abuelo, D. Vicente, hombre recio, que debió ser apuesto y que los años habían ido achicando, pero no eliminando, su compostura y altivez. Luego estaban Jaime y Carlos, un poco más pequeños que Pedro, mi marido, los dos casados con dos rancias de pueblo que parecía que no las habían follado nunca en condiciones. Y la pequeña, Rocío, que se había juntado hace poco con un cubano que quitaba el hipo.El fin de semana pasado nos juntamos en el pueblo, era la comunión de Carlitos, uno de los sobrinos de Pedro, y con pocas ganas, allí que fuimos. Después de la celebración en la iglesia fuimos a comer a casa de D. Vicente. Tiene una casa enorme, típica manchega, en las afueras del pueblo, con un gran patio central y las estancias alrededor. Como preveía calor, me puse un vestido ajustado de colorines, medias claras y taconazo para impresionar a las tontas de mis cuñadas y tuvieran de qué hablar.Como es habitual en estos casos, la sobremesa se alargó, regalos, café, copas, la gente se empezó a desparramar cuando comenzó, la actuación de los payasos y el karaoke con baile posterior, ufff, sopor. Yo le dije a Pedro que subía un momento a la habitación, al baño. Era verdad, pero también quería escaparme un ...
    ... rato de ese bullicio.Al terminar de subir las escaleras, giré a la derecha para ir hacia nuestra habitación, al ir llegando a la puerta de la biblioteca oí un fuerte alboroto de voces, eran varios, me pareció reconocer a Jaime y a Carlos, pero el que más gritaba era Yoel, el cubanito de mi cuñada Rocío.Paré un momento, risas, “esa ha visto más pingas que en un baño público”, ja, ja, ja, más risas. “Si seguro el cornudo de nuestro hermanito no la da bien cada noche, ¿verdad Jaime?, más risas, “ja, ja, ja, siempre fue un poco atontado este Pedro”. “Eso es lo que en Cuba decimos un comemierda, porque desde luego la petrolera está pa parar los carros”. “¿Qué dices Yoel? Traduce que no entendemos un carajo”. “Ah mi niño, pues que es una pendeja entradita en años que seguro que le gustan las pingas gordotas y largas de los negros como yo”. Más risas.Yo ahí parada escuchando, no daba crédito, ¿estaban hablando de mí? No estaba enfadada, al revés, me noté excitada, casi sin darme cuenta mi coño se empezó a humedecer. Quería pasar de largo y hacer como que no había oído nada pero de repente, sin saber por qué, me planté en medio de la puerta. Se quedaron mudos. “Hola iba para mi habitación y oí jaleo”“Oh mi niño, ¿que si no hay carne? Lo que no hay es lata pa´envasarla. Entra mi amol que tenemos chiquito fetecón” Yoel fue el único capaz de articular palabra. Muy despacio me dirigí a Jaime, y cogiéndole la copa de las manos, para dar un largo sorbo de su cubata, dije: “¿de qué ...
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