1. Sinvergüenzas sometidos (Cap. 4)


    Fecha: 07/11/2017, Categorías: Dominación Autor: ALTEZA, Fuente: CuentoRelatos

    ... práctica y destreza en las tareas de la casa, ya hasta se habían acostumbrado a usar uniformes de sirvientas con todo y tacones. Al poco tiempo no solo ya sabían ser todas unas perritas domésticas, sino que también ya habían aprendido a obedecer y recibir órdenes mediante señas, chasquidos, palmadas o silbidos. De esa manera su valor como perros aumentaba, ya que pocas veces un esclavo sabe interpretar a señas que debe hacer. El chasquido es usado para llamar al esclavo en distancias cortas, ya que por ser poco audible solo puede ser escuchado a muy corta distancia. El silbido permite al esclavo saber que su Ama o amo lo está necesitando, el silbido se usa para llamarlos a una mayor distancia. En cuanto a las palmadas, dependiendo del número de palmadas tiene un significado distinto de la orden a cumplir. • Una palmada significa que el esclavo esté atento a su Ama. • Dos palmadas significa que el esclavo se acerque al Ama o amo, se arrodille y le bese los pies • Tres palmadas significa deja de lamer o besar los pies y regresa a tus tareas. Usando este método no solo hace subir la cotización del esclavo para una futura venta o renta, ya que así el amo o Ama no deben estar dando de gritos, en cuanto a la calidad del esclavo se trata, ahí se demuestra que ha sido entrenado por un Ama experimentada. Faltando un día para concluir la estancia de las chicas en el hotel, su Alteza les llamó para saber cómo se la habían pasado esos días de ser atendidas como reinas, las chicas ...
    ... respondieron que era el mejor hotel en los que se habían hospedado, su Alteza agradeció el cumplido, las chicas le preguntaron a su Alteza lo siguiente: Alteza ¿habría algún inconveniente para llevarnos a nuestros ex novios pero ahora en calidad de esclavos domésticos?, es que ahora en el hotel nos acostumbramos a ser servidas como diosas, y si estos animales nos pueden ser útiles, pes que sea en calidad de esclavos a nuestros pies. Su Alteza respondió que no había ningún problema por su parte, solo tendrían que pagarle la entrenada de esa semana y firmar un contrato en donde se estipulaba que sus ahora esclavos pasarían a ser propiedad de su Alteza y que ellas solo podrían tenerlos en calidad de renta mensual, las chicas estuvieron de acuerdo y enseguida se celebró la firma del contrato. Una vez firmado el contrato, su Alteza dijo a las chicas que ya que ahora eran solo de ellas a modo de renta, ellas tenían y debían cubrir el importe pactado entre los primeros cinco días de cada mes, de no recibir el pago en ese plazo, su Alteza podría recuperar a sus perros, para poder ofrecerlos a otras personas. Las chicas preguntaron que comían esos estúpidos, su Alteza les contó que justamente lo que antes les era repulsivo, ahora para ellos era todo un festín. Las chicas asombradas por el buen trato de su Majestad le dieron un bono extra no solo por el buen servicio del hotel, se lo dieron por la gran atención personalizada que ellas recibieron por parte de su Alteza. Ella les comentó a las ...