Imitando las putas - Relatos Eróticos

Imitando las putas

Desde que era una jovencita me llamaba la atenciòn el modo en que los hombres miraban a las mujeres, cuando paseabamos en auto con mis padres y se pasaba por una calle donde habian prostitutas mi padre las miraba comiendoselas con los ojos, lo mismo hacian mis dos hermanos mayores, yo soy la mas joven de una familia de tres hermanos, serà porque los hombres saben que las pueden tener cuando quieren, que pueden hacerles hacer lo que ellos quieren sin tener que preocuparse mucho, pueden hacer solo sexo sin tantos rollos, las ven y saben que ellas follan y pueden ser folladas en cualquier momento, y por eso las desean, el hombre ama las putas y lo aprendì desde muy joven. Me casè muy joven a 22 años sin haber tenido muchas experiencias sexuales, casi todas las hacìa masturbandome como loca porque deseaba tener aventuras eroticas pero el respeto por la familia me lo impedìa, la vida me enseñò que estaba equivocada porque mi primer marido me engañaba cada vez que podìa sin preocuparse, mientras que yo habìa juntado mis fantasias en un rincòn por la familia, hasta que me cansè, me queria sentir deseada y mirada como las mujeres de la calle, como las mujeres faciles. Le pedì ayuda a mi mejor amiga para que cubriera mis salidas, me cambiaba en su casa, me ponìa minifadas que dejaban ver todas mis piernas, mi especial culo era resaltado de pequeños tangas y con sujetadores adecuados ya que mis tetas no son grandisimas hacìa una buenisima figura, me excitaba hacerme ver provocante y ...

... poner cachondos a los hombres a mi alrededor pero no me animaba a ir màs allà. Una noche volviendo de uno de mis paseos detuve el automovil en una carretera para sacar los cigarrillos que tenìa escondidos en el baùl, grande fuè mi sorpresa cuando el automovil no quiso ponerse en marcha, me encontraba sola, mi amiga no respondìa al telefono y yo como estaba vestida no podìa llamar a mi marido, no sabia que hacer, lagente que pasaba me miraba y yo me di cuenta que no pasaba desapercibida, sentì que se parò un auto me acerquè y grande fue mi sorpresa al oir que me preguntaba" cuanto dinero quieres? Vamos subete" realmente me estaba creyendo una prostituta, estaba confundida y tenìa un poco de miedo pero tambièn estaba tan cachonda como èl o talvez màs, pensè a lo que me hacìa mi marido... y subì....arrancò inmediatamente "entonces cuanto cobras?" nada si me tratas bien y me ayudas con el auto...se parò un poco mas adelante sacò su polla y me dijo"chupa puta que te va a gustar" empecè a chupar otra polla casi cinco años de ver nada màs que la de mi marido y me gustaba despuès me hizo bajar del auto porque querìa masturbarse mientras me miraba el culo, sentì que se corrìa mientras me tocaba, me dì vuelta y le apoyè la boca en los labios, me llevo de vuelta y me dijo"eres fantastica, no puedo ayudarte con el auto, pero espera que te mandarè unos amigos que te daràn una mano". Diez minutos despùes llegaron tre muchachos uno se puso a ver el auto y los otros me dijeron "acompañanos que ...