Educando al hijo de mi vecino... (1de 2) - Relatos Eróticos

Educando al hijo de mi vecino... (1de 2)

... sobárle, el golpe se extendía a su íngle, y al pasár la mano, mis dedos rozában sín querér su miembro, y parte de sus huevos, confórme le íba sobando,  comenzó a tenér una ligéra erección, lo dejé de sobar, y le coloqué su venda y le pedí qué descansára... Una véz en mi cama, recordé cómo crecía su miembro bájo la tela del calzón, terminé bastante caliénte, y me masturbé cómo todo buén Bisexual, con mi juguete déntro.... 
Pasáron unos 3 meses, y no había vísto a Salim por náda, íba cáda día a la tienda de abarrotes de Diego, más no quíse preguntár por Él jamás, y ése siguiente sábado, para variar, alcancé a escuchár qué tocában mi ventana a deshoras, me asomó, y ví qué éra Salim, lo pasé, y por lógica, pensé que venía tomádo, le ofrecí un café y me díjo: - hásta dos me tomo...
Lo observába, y ví qué venía en buén juicio, y sonriénte me comentó que ahóra trabajába con su mamá, qué había hecho comentarios con su mamá de cómo lo había tratádo yo, y que ella apoyaba qué fuéramos amigos, pasámos charlando por cási el resto de la madrugáda, le pregunté de cómo íban ésos golpes... .. Me díjo qué sólo le dolía el de la pierna, y me pidió que le revisára, recordé cómo le creció su miembro, y quíse evitár vérlo, y Él insistió, pasámos a la sala, y le pedí qué bajára un poco el pantalón, lo toqué y Él se quejó un poco, me pidió sobárle, y fuí por mis pomadas, cuándo regresé, Él se había quitado el pantalón y se sentó con una pierna sóbre el sillón, comencé a sobárle, y buscó ...

... acomodárse mejor, y al hacérlo, mi mano chocó varias ocasiones en sus partes, y exclamó: - Ah qué rico...  • Dicho ésto con doble intención, y cerró los ojos, le díje que me fuéra indicando en dónde le dolía confórme le fuéra dándo masajes, llevé mi mano a la íngle, y díjo; - Un poco más arriba.... • Subí a su púbis, y díjo; - Ahhhh, ahí está bién, así.... • Y de nuéva cuénta, llegó ésa erección, continué sobándo, tratándo de no llegár a ella, mis ojos se habían clavádo en su miembro, contemplándo cómo crecía, y ví cómo se presentába una mancha de líquido en la punta del cabezóte, a través de su calzón, la sangre se agolpába en la cabéza, entré mis nalgas, y comencé a mojárme también de la punta de mi Pené con líquido preseminal, y bajé un poco la mano, a manera de qué mis dedos fueran recorriéndo su íngle...
Salim bajó su cuerpo un poco más y con ello quedáron sus huevos sóbre una de mis piernas, y mi mano arríba de su pene seguí masajeándo, pero el púbis, y volví a bajar la mano a la íngle, de repénte bajó su calzón y me díjo; - Aquí es dónde me duéle más.... • Sujetándo fírme su pene... Y sín más preámbulos, tomé su miembro y comencé a masturbárlo, Él lo estába disfrutándo en verdád, y me agaché para pasárle mi léngua a lo lárgo de la piél de su miembro, tán prónto atrapé con los lábios su grán cabezóte, me sujetó la cabéza con ámbas manos y bombeó con suavidad, buscándo entrár lo más déntro posible, cosa que con gústo ayudé a que se cumpliera,  me jaló hacía Él, y se púso a ...