1. Las tangas de la becaria


    Fecha: 15/11/2017, Categorías: Fetichismo Autor: karlos7772, Fuente: CuentoRelatos

    ... primer semana que comenzó su rutina yo pude observar que su bolso era más grande del que normalmente llevaba, cuando le pregunte al respecto me respondió que ahora llevaba una toalla y su ropa deportiva, cuando escuche eso lo primero que me vino a la mente era si también se cambiaba de ropa interior, y por supuesto tenía que averiguarlo, ese mismo día busque algún pretexto para que saliera de la oficina por un rato y así pudiera hurgar en su bolsa para ver si por fin hacia realidad mis fantasías fetichistas con la ropa de Fátima. Cuando ella salió de la oficina puse seguro a la puerta de mi privado y acto seguido coloque su bolsa en mi escritorio, para ese momento mi pulso comenzó a acelerarse imaginándome lo que me esperaba, al abrir su bolsa lo primero que encontré fueron objetos de uso personal, como maquillaje y algún peine entre otras cosas, trata de memorizar el acomodo de toda para que cuando regresara no notara que alguien había registrado su bolsa, justo al fondo pude ver una toalla doblada así que me apresure a sacar todo lo demás hasta llegar a ella, lentamente la saque y pude ver que abajo de ella había un rollo de ropa, tal vez por mi obsesión con Fátima o simplemente por mi fetichismo el olor de su sudor en la toalla al contrario de desagradarme me éxito tremendamente al grado de sentir como mi pene estaba a punto de reventar el pantalón, pero aun venia lo mejor, desenrolle poco a poco lo que resultó ser un pants de licra de esos ajustados y adentro una blusa ...
    ... de la misma tela, sin embargo, el premio estaba justo ahí, dentro de la blusa que también era un rollo encontré un top de los deportivos, color rosado con líneas en color negras en los bordes y justo adentro de ese top lo que tanto tiempo llevaba deseando, mi mayor fantasía hasta el momento estaba por cumplirse, una hermosa tanga del mismo color con las mismas líneas color negras a las orillas, para ese momento ya no pude soportar más y rápidamente y como desesperado comencé a masturbarme, mi pene estaba completamente lubricado y podía sentir como palpitaba, quise disminuir la intensidad para disfrutar un poco más, primero tome el top que aún estaba empapado en el sudor de Fátima y comencé a disfrutar de ese rico aroma, sin embargo sabía que no podría más, busque rápidamente el puente de la tanga y aún caliente por su sudor lo lleve a mi nariz, ahí estaba ese exquisito aroma a intimidad a fluidos a sudor a vagina a sexo, solo podía imaginarme entre las piernas de Fátima haciendo a un lado esa tanga para hurgar con mi lengua dentro de su jugosa vagina y llenarme con su sabor, me perdí en la excitación y no pude más, mi pene reventó en chorros de semen y me perdí por unos instantes. cuando reaccione comencé a guardar todo, pero recordé que apenas unas horas antes esa tela había estado metida en el culo que tanto deseaba chupar y lamer me hizo tener otra erección y decidí seguir disfrutando del aroma más íntimo de Fátima al menos un par de veces más. La mejor parte es que a pesar ...