1. GERMAN 1 DEGUSTADOR CULITOS TIERNOS


    Fecha: 01/09/2019, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: German, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    Hola, me presento, soy Germán, nacido en Estados Unidos por casualidad, pero latinoamericano de corazón. Tengo 28 años, tez tostada, 1,75 mt, 70 kilos, lampiño y una verga de 21,5 cms.
    Desde que tuve conciencia, noté que a todo el mundo llamaba atención mi pene por lo largo y delgado, que hasta se veía desproporcionado respecto de mi estatura, hasta que a los 12 o 13 años me empecé a desarrollar.
    Digo que llamaba atención,pues cuando alguien me veia desnudo por cualquier circunstancia, mostraban sorpresa en sus ojos, ya que miraban mi verguita y me miraban a los ojos, imaginándose quizas que cosa. Asi pasaba con médicos y enfermeras en mis controles rutinarios, o cuando sufrí una hernia inguinal y hube de ser intervenido. Mi tia Marta,hermana menor de mi vieja, se aprovechaba siempre de hacerme cambiar ropa interior y disimuladamente tocarme (al principio) e incluso hacerme las primeras mamadas cuando aun no pasaba de 8 ó 9 años, siempre cuando se quedaba en casa y yo fingia dormir.
    No obstante no saber exactamente de que se trataba, ello me producia un cierto placer e incluso una erección que ella aprovechaba hasta que se cansaba. Su edad era de 14 años.
    Tambien se producía comentarios en el colegio, sea al estar orinando en los baños o al hacer cambio de ropa para el deporte, empezando a decirme “burrito” entre las risas de los chicos de clases mayores.
    Y así se daba todo, hasta que a los 11 años un chico mayor me propuso hacerme una “mamada”, yo haciéndome el ...
    ... ignorante, pero recordando la sensación que me producía mi tia, acepté, ya que el chico me parecía bastante apuesto y mis hormonas ya se empezaban a revolver. Asi pues fue que una tarde nos fuimos a la zona de camarines y sin mayor preambulo me saqué la verga dejándola a disposición del chico, quien ávidamente me empezó a chupar, a delizar hacia atrás el prepucio, una y otra vez consiguiendo una erección potente, la primera a conciencia, mientras que el se la metía hasta el fondo de su garganta, tomando mis huevitos con su mano libre.
    ¿Te gusta la paja? Me preguntó, a lo que yo mecánicamente respondi con un SI, adivinando que se refería al movimiento de sube y baja en mi miembro, lo que efectivamente me estaba produciendo una agradable cosquilla.
    Todo terminó abruptamente cuando alguien abrió alguna puerta con lo que salimos intentando pasar por una actitud normal, pero que mi erección mostraba a las claras que algo especial había ocurrido.
    No pasó a mayores, dado que era un auxiliar que iba a recoger algunos artículos de aseo, y que interrumpió aquella primera experiencia y no vio nada.
    Prontamente el chico me habló de nuevo, pero ésta vez me invitó a pasar por su casa pues me dijo sus padres no estaban y podíamos hacerlo mas tranquilos. Acepté.
    Saliendo de clases nos dirigimos a su apartamento, que efectivamente estaba sin moradores y nos fuimos a su cuarto. Ahi encendió su computadora y hábilmente abrió una pagina porno gay. Mis ojos casi salieron de las órbitas con lo que ...
«123»