LA TOMÉ DORMIDA - Relatos Eróticos

LA TOMÉ DORMIDA

No se como comenzó, sinceramente a estas alturas poco importa amigos.

Solo se que poco a poco había visto a mi hija crecer, y pasamos de jugar a te cuando llegaba del trabajo a coger como locos. 

En fin, nuestro primer encuentro sin penetracion ocurrió cuando tenía 12, mi pequeña niña estaba entrado en la pubertad y no les voy a presumir del cambio de su cuerpo o de como despertaba mi deseo por que no lo hacía, nunca me han atraído las niñas pequeñas, pero aquella tarde de abril, después de ir a recogerla al colegio, ella me comentó que había un niño que le gustaba y pensé,¡Vaya mi linda niña ya esta creciendo!. 

Así que después de llegar a casa aquel día y despedir a mi mujer que trabajaba por las tardes en una tienda departamental, me quedé a solas con mi hija, hasta ahí todo normal hasta que la niña pego un grito proviniente del baño. 

Corrí hacia el y sin pensar meló abrí las puertas, por cualquier peligro que pudiera haber, no pensé en nada ya que actualmente vivimos épocas difíciles y mi barrio no es el más tranquilo. 

Así que me lleve tremenda sorpresa cuando mi princesa se me abanlanzo toda húmeda y desnuda,ella se me monto encima, sus pequeños y aun en desarrollo pechitos quedaron en mi pecho, su conchita mojada por el agua, sobre mi parte inferior, más específicamente arriba de mi Verga, sus piernas apenas y se aferraban a mi trasero, y sus brazos tratando de llegar a mi cuello, y se que por lo general no veía a mi niña de otra forma mas que como ...

... un padre sobreprotector, pero sentir sobre mis short, la humedad hizo efecto y pego la tela a mi pene que estaba algo abandonado. 

Algo agitado, desconcertado busque la razón del temor de mi hija y encontré una rata saliendo de algún escondite, esto es un dato importante por que mi pequeña odia las ratas, o cualquier roedor, el caso es que mi hija se removia entre mis piernas, lo cual me incómodo, puesto se me estaba poniendo duro el pene. 

La razón es que mi mujer y yo llevábamos tiempo sin tener relaciones, el caso es que ahí estaba yo con una niña colgada de mi cuello, desnuda, moviéndose de forma erratica y gritando como loca que sacara al animal, mientras la rata hacia tiempo se había ido, por todo el alboroto. 

Y heme ahí, tratando de no perder el equilibrio con la niña trepada, rozando mi miembro que entre tanto traqueteo de mi hija se me había puesto tiezo, y  
es que vamos me sentía desconcertado por semejante reacción

-Nena bajate ya se ha ido- le dije una vez que me recupere un poco de mi pequeño trance momentáneo.

-No papi, que tal que aún está ahí-decía auncon miedo mientras trataba de subir más.

-nena no está ahí lo juro-le respondí, ella respondió con un chillido moviéndose pegando su coñito sobre mi miembro, causando que to soltara un pequeño gemido ahogado.

-seguro papi?? - le escuché preguntar seguido de - te pegue papi?.

-no nena pero bajate ya - le dije algo nervioso pues estaba sobre mi y me sentía muy excitado - a anda ya no ...