1. Un compañero especial 3


    Fecha: 15/01/2020, Categorías: Primera Vez Tus Relatos Autor: Marcos y, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    ... hacía que su cabecita fuera abriendo paso lento pero seguro en mis efinteres. Sentía su respiración en mi nuca, yo separado mis nalgas y arqueada más mi cintura para empinar mi cola, ofreciéndosela por completo. Sin darme cuenta yo estaba propiciando que me penetrara sin el hacer gran movimiento. Y como ya era de costumbre empezó a hacer su clásico pum pum pum pum, repiqueteo pero sin dejar de hacer presión, pero ya no afuera, cada pum pum pum, hacía que su poronga se introdujera milímetro a milímetro. Ya empezó!!! Mandó su falo hasta el fondo, yo instintivamente pegué un grito, de dolor-placer, y él con su palma derecha tapa mi boca haciendo una fuerte presión, y comenzó sus movimientos pélvicos introduciendo y sacando, introduciendo y sacando. Ya arrancó la maquinaria, paf paf paf paf, era lo único que se escuchaba que no era otra cosa que el golpe de sus caderas contra mis nalgas , hacía fuerza con mis codos para qué mi macho me introdujera más su pija en mi orto. Y siguió el paf paf paf, sin detenerse, dándole un ritmo frenético a sus embestidas. Mi cabeza lo único que pasaba era que ese hombre que taladraba mi culo me estaba proporcionando un placer nunca antes vivido. Sentía con cada embestida un placer inconmensurable, yo no paraba de masturbarme, el placer y la locura era muchísimo. Brian parecía poseído, tenía una energía impresionante. Muestras exhalaciones y gemidos parecieron detonar una luz de alarma en la cabeza de Brian, porque de repente este se detuvo y me ...
    ... dijo susurrandome al oido tenemos que hacer menos ruido que nos van a escuchar. Ahí fue aflojando el ritmo de su vaivén. Hasta que la sacó por completo. Date la vuelta, mi putito, con voz baja me ordenó. Me siento y quedo encima de la almohada, ofreciéndole nuevamente me agujerito, pasó sus brazos por debajo de mis muslos quedando estos encima de sus hombros. Su pene era una barra de carne más dura que el acero, yo veía como éste le llegaba casi a su ombligo, lo tomó con su mano derecha y lo direccióno a mi orto. Con mis piernas por encima de sus hombros, mi macho comenzaba otro serruchar frenético. Qué energía por Dios!!! Y otra vez paf paf paf, sus huevos y su pelvis se estrellaban contra mis nalgas. Pajeate porque me vengo en cualquier momento. Y así fue comencé a masturbarme, Brian acercó su boca a la mía sin parar de serrucharme, sólo para abrazarme para decirme que yo era hermoso, su respiración se agita,hace cada vez más fuerte, con su boca abierta vi como apretaba los dientes y cerrados los ojos advirtiendo que su acabada era inminente, al ver todas las acciones de mi macho esto hizo que yo explotara, y así fue, de mi pene empezó a brotar varias chorros de leche. Cuando súbitamente, mi macho saca su pija de mi cola y con un frenético accionar con su mano derecha, baña  panza ,pecho, cara ya hasta boca con su licor. Mientras cae rendido encima mío, no le importó ensuciarse con su leche. Agitados por completo nos fuimos quedando dormidos sin hablar una palabra. Al parecer ...