1. Don Alfredo 6


    Fecha: 13/10/2020, Categorías: Primera Vez Tus Relatos Autor: Pedro, Fuente: RelatosEroticos-Gratis

    Después que acabe me di cuenta lo que había hecho, la calentura y la locura me habían llevado a no ser solamente un putito complaciente y sumiso. Lo que más me llamó la atención al segundo, porque josé sigo chupando hasta dejarme completamente seco.fui bajando por su cuerpo hasta que quedamos los dos boca a boca y nos fundimos en un beso largo y profundo. No quedamos los dos tenido uno al lado del otro, y se me dio por preguntarle si alguna vez lo había hecho, y él me contestó qué no, y todas las veces que había estado con otro varón, había sido 100 por 100 masculino de activo, ni siquiera cogiéndose a otro le hiizo una paja.pero ya le despertaba cualquier tipo  mi locura, mucho más que los demás. Eso sentaría presidente para que la próxima vez que estuviésemos juntos algo más le haría, no sé qué, pero algo más. Me acompaña hasta cerca de casa, sin que nos viera nadie nos despedimos todas las maneras amorosas que podíamos. Navidad, Hola tarde mientras todos dormían la siesta, golpeó las manos, y yo salí a su encuentro. Me volví a la pieza de mi madre que estaba durmiendo la siesta.en voz baja para que no se despierte nadie de pedir permiso para ir con los chicos, a lo que mi madre entre dormida me dijo que no había problema anda tranquilo. Salí corriendo con una sonrisa de oreja a oreja, hacía mucho calor y no andaba nadie por el campo, así me dijo que no podíamos ir a nuestro nidito porque el ciruja estaba completamente mamado y no lo pudo despertar, y qué tiene!?? Le ...
    ... pregunté, sí está mamado y no se puede prestar vamos igual, total está dormido,. Le dije muy seguro. Y si se despierta?? Preguntó José. Ahora nos fijamos y vemos, vos entras si está muy dormido y no se despierta entramos le propuse. Y así fue, José entró muy despacio a la casilla, el  linyera roncaba, José  lo zamarreada lo llamaba Carlitos Carlitos!! Y Carlitos no se despertaba. Fuimos a la cocinita, y ahí vamos a estar mejor, tiramos una manta en el piso, me arrodillé y le empecé a chupar la poronga a José. Disfrutaba cada segundo de lo que estaba haciendo, disfrutaba sentirse glande gordo y rosado, cómo me pasaba por el paladar hasta la glotis, produciendo amé arcadas, me encantaba acariciarle los huevos, miraba con mis ojitos hacia arriba como buscando la aprobación de José a lo que estaba haciendo, José suavemente me tomaba de la cabeza y me un día para que me tragara aún más su herramienta. Todavía no creía oportuno pero en algún momento le iba a poner mi pija en su boca para que me la chupe, seguí deleitándome con ese trozo de carne dentro de mi boca. Me puse en posición perrito, para que mi macho me penetrara, se acomodó detrás de mí, y suavemente me la puso, comenzando el traqueteo va y viene, con los ojos cerrados estado en el mejor de los mundos, yo gemía como una gatita en celo, pero ese momento ideal explotó de golpe al sentir la voz gangosa y ronca de Carlitos, qué decía: yo pensé que te cogía a una minita no al hijo del gallego, gallego es mi amigo, por mi papá, yo ...
«123»