1. Encuentro caliente


    Fecha: 20/12/2017, Categorías: Hetero Fantasías Eróticas Autor: Lolitassr, Fuente: CuentoRelatos

    Estaba esperando en el cuarto, sentada en la cama. Mis rulos estaban más alborotados que de costumbre, mi piel olía a vainilla y se notaba brillante, mis ojos tenían un brillo único de éxtasis. Estaba sentada en la cama, enfrentada a la puerta, tenía una bata de seda blanca traslúcida y un conjunto de ropa interior de encaje del mismo color, muy delicada. Habíamos hablado el día anterior, ya no aguantábamos la desesperación de no poder encontrarnos realmente y de sólo explorarnos virtualmente. Habíamos quedado en vernos en un hotel intermedio para los dos, acordamos qué habitación, a qué hora y todo lo demás. Ambos queríamos que todo sea perfecto. El cuarto estaba ambientado con luces bajas, música sensual de fondo, una gran cama de sábanas rojas con aroma exótico y hasta sensual. Escuché cómo alguien metía la llave en la puerta y me senté derecha de inmediato. Cuando la puerta se abrió un chico alto, castaño y de ojos claros se presentó, tenía una camisa blanca sencilla y unos pantalones negros, estaba informal pero elegante a la vez. Y apenas nuestras miradas se encontraron no pude evitar mojarme un poco más de lo que ya estaba. Esa noche ambos íbamos a disfrutar. Mordiéndome el labio me puse de pie, me acerqué a él lentamente con mi mirada clavada en la suya, cuando estuve a unos centímetros estiré mis manos para acariciarle el abdomen sobre la camisa, sentí cómo él suspiró silenciosamente y bajé mi mirada a mis manos, las apreté en puños y me acerqué hasta rozar mis ...
    ... piernas desnudas con su pantalón. —¿Te gusta? —Me preguntó con un tono medio serio pero medio divertido, sonreí y asentí con la cabeza, volví a mirarlo a los ojos y él subió su mano a mi cuello— No te haces una idea de cuánto esperaba esto —y sin pensárselo estampó su boca contra la mía. Primero nuestros labios se movían lentamente, mi brillo labial con olor a uva pintaba los suyos con calma; después me mordió el labio e inconscientemente abrí un poco mi boca, metió su lengua y el ritmo subió, con el sabor a menta en su boca y el olor a uva de mi brillo labial nuestras lenguas se movían desenfrenadas una contra la otra, apasionadas tratando de apagar un fuego que no estaba ubicado en la boca, sino un poco más abajo. Poniendo mis manos en su pecho me alejé para tomar aire, sentí como él se rio y me ruboricé de inmediato, sus manos empezaron a masajear mis hombros y yo cerré los ojos. Sentí su boca en mi oreja y después en mi cuello, de repente su boca empezó a chupar la piel de mi cuello con fuerza, provocándome un fuerte gemido, haciendo que él baje mi bata al suelo. Agarré su cara y, después de besarlo con fuerza, lo guie a la cama, hice que se sentara y empecé a desabotonar su camisa, mis dedos temblaban levemente mientras él exploraba mis piernas con sus manos. —No estés nerviosa —me dijo en tono bajo, mientras de fondo se escuchaba un grito agudo y sensual que provenía de la radio, la música era perfecta para hacer el amor. —No lo estoy... —le saqué la camisa y me mordí el ...
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