Me comí el culito a mi madrastra - Relatos Eróticos

Me comí el culito a mi madrastra

Soy Ecuatoriano, Mi nombre es Junior, tengo 22 años, cuerpo atletico por que me fascina realizar ejercicios para mantener mi cuerpo en forma, mi madrastra se llama Mariana, edad 39 años, alta de 1,75, pechos normales redondos, cintura 69, y una caderas fenomenales diría 105 cm. La historia que les contaré es 100% real, esto pasó hace unas semanas atrás cuando a mi padre le salió ir a verificar unos departamentos en la ciudad de Esmeraldas, y tenía que encontrar la forma de hacer un buen negocio, ya que él trabajaba como agnte vendedor de bienes y raíces, era casi finales de Noviembre y tenía que comprar los departamentos por que se venía la temporada playera y los departamentos subirían de precios, nos encontrábamos en el almuerzo con mi padre y Mariana mi madrastra cuando nos contó sobre el viaje de negocio que tenía que realizar. Fue entonces que despues del almuerzo me dijo que lo llevemos hacías la terminal aérea para cumplir con el viaje, le dije que yo manejaría que no habría ningún problema, me fui a mi cuarto a cambiarme y mi padre que ya tenía listo el equipaje se sentó a ver las noticias en la tele y Mariana se fue a su cuarto también para cambiarse, yo me cambié en forma rápida y al pasar por el dormitorio de Mariana que comparte con mi padre, me pude dar cuenta que se encontraba de espaldas hacía la puerta que estaba un poco abierta y se estaba arreglando su tanga color roja, por lo que me detuve a observar un poco de ese monumental cuerpazo, temiendo que se ...

... diera cuenta me aparté del lugar porque ya se estaba terminando de arreglar, me dirigí a mi cuarto para recoger mi billetera ya que ahí tenía mi licencia de conducir y en mi mente rondaba ese cuerpo fenomenal de mi querida madrastra. Salimos de la casa rumbo al aeropuerto, yo manejaba pero mi pensamiento estaba lleno de ese momento en que vi a mariana con esa tanga que le quedaba fenomenal, llegamos al destino señalado mi papá revisó los documentos y se despidió, no nos movimos hasta que ya la silueta de mi padre se haya esfumado, al darnos vuelta para ir al parqueadero mariana me dice si la puedo llevar a comprar unas cervezas al comisariato, a lo que le asentí con mi cabeza, ya se estaba anocheciendo nos fuimos, compramos las cervezas y nos dirigimos a casa, en el trayecto mariana solo me hablaba de cómo había conocido a mi padre, y que era una persona muy atenta con ella, llegamos a casa metí el carro al garaje y ella subió con las fundas de comprado que habíamos hechos, puso las cervezas en el congelador y me dijo si yo quería beber con ella para contarme unas cosas que sabía de mi padre, le dije que no habría problemas que yo la escucharía y se fue a su cuarto a bañarse por que decía que se sentía sudada, me fui a mi cuarto a ponerme una bermuda y un camiseta para andar en casa y me adelanté a la sala , prendí el equipo de sonido cuando aparece Mariana en bata de dormir un poco transparente, se notaba el redondez de sus bellos senos y dejaba ver claramente su tanga que ya la ...