1. El reencuentro.


    Fecha: 24/02/2018, Categorías: Lesbianas Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Llevaba dos semanas sin verle, se encontraba con su familia a kilómetros de mí. Me sentía rara, pasaba los días contando el tiempo que faltaba para volver a tenerle frente a mí. Se iba acercando el momento, era Domingo. El Lunes nos encontraremos en el muelle de los Cristianos y partiremos hacia un apartamento que hemos alquilado que se encuentra justo por encima de la playa Las Vistas. Llegará sobre las 20:00h., por lo que saldremos a cenar fuera y a dar un paseo por la playa. Llegó, se encuentra caminando hacia mí. Sonrisas, nervios. Nos fundimos en un abrazo interminable, besos, miradas. No sé cómo explicarlo, pero siento un alivio dentro de mí, ya está a mi lado. Caminamos dirección el apartamento. Llegamos y organizamos nuestra ropa y pertenencias, mientras me cuenta cómo le ha ido el viaje, cómo lo ha pasado, etcétera. Nos arreglamos para salir a cenar, ¡está preciosa! Hemos terminado de cenar. Me ha contado todo lo habido y por haber de su viaje, de sus familiares. Yo, le he contado en qué he invertido mi tiempo. Vamos a pasear por el paseo de la playa antes de volver al apartamento. Dadas de la mano, me dice que porqué no bajamos a la playa, que le apetece tocar con los pies el mar. Como niñas pequeñas comenzamos a correr la una tras la otra, a lanzarnos arena, a mojarnos. Está todo oscuro, nos vemos gracias a la luz de la luna llena que vigila la noche. Entre risas, empujones, revolcones, etcétera, acabé tumbada encima de ella. Le miré a los ojos, la besé como nunca ...
    ... antes le había besado, con pasión, con ganas. Comencé a darle besos por el cuello, posándome en su oreja, haciéndole sentir como mi respiración se acelera, susurrándole que le echaba de menos. Me gira colocándose ella encima, se deshace de mi camisa. Me besa, siento miles de cosquillas en mi interior. Me muerde, me muerde la oreja erizando mi piel. Le digo que no aguantaba más sin sentir su cuerpo. Me deshago de su camisa. La vuelvo a girar quedando yo encima de ella. Le quito su sujetador, la miro y sonrío al bajar a sus senos. Empiezo a jugar con ellos, con mi lengua en ellos. Comienza a sentir como se eleva mi temperatura, como empiezo a poner esas caras que tanto le gusta que ponga. Mis gemidos comienzan a salir a su exterior. Me dice con su respiración entrecortada que tenía muchas ganas de sentirme así, que tenía muchas ganas de hacerme el amor. Me deshago de su pantalón y del mío al mismo tiempo. Me gira y me deja de espaldas a ella, comenzando a acariciarme desde atrás, como sabe que me gusta. Me toca el culo, susurrando un "cuánto lo echaba de menos". No aguanto más, estoy totalmente lubricada. Le digo que necesito que me toque, sentirle en mi sexo de una vez. Me pone boca arriba y baja. Baja a mi sexo, a jugar con su lengua en él. Inevitablemente comienzo a mover mi cintura, a gritar de placer. Le agarro del pelo, le araño. En cuestión de minutos le digo que me penetre como sólo ella sabe hacerlo, que necesito sentir sus dedos dentro de mí. Y así lo hace. Me coloca ...
«12»