1. Dejé que mi exnovio se tirara a mi primera sumisa


    Fecha: 05/03/2018, Categorías: Dominación Autor: Margaryt, Fuente: CuentoRelatos

    ... miraba enamorado y su pene se puso como un borrico de duro, muy bello su pene. Le di un azote en el culo y le dije: — Venga Rafa, a por ella, que es para ti, mi regalo por haberte hecho sufrir. Rafa, empalmado como un burro, se arrimó al culo de Magda y le metió la punta en el ano, Magda gritó, el pene de Rafa hacía que los cachetes de Magda se le quisieran meter para adentro, pero al final su ano se relajó permitiendo ser tomado. Yo me quité las bragas y comencé a masturbarme sentada en una silla mirándolos. Rafa hacía ruidos con la boca, su pene fue entrando, hasta que sus testículos chocaron con las nalgas encremadas de mi sumisa. Al poco el pene de Rafa entraba y salía entero como un cilindro veloz, abriéndola toda, es grande su polla, se me hacía la boca agua viéndolo sodomizarla. Magda comenzó a gemir, el sonido de sus cuerpos llenos de crema y del ano abierto de Magda golpeando contra la polla de Rafa hacían un ruido casi animal, que barbaridad. Me acerqué a ellos desde atrás, acaricie los cachetes velludos de Rafa y con mis largas uñas pintadas de verde le rocé los testículos. Rafa abrió las piernas esperando que le tocara más aun los huevos; metí mi mano entre sus piernas dejando que sus bolas se deslizaran sobre el dorso de mi mano, una mano que avanzó hasta acariciar el bollito precioso de Magda. Le metí dos dedos en el coño mientras los huevos gordos y velludos de Rafa seguían deslizándose sobre el dorso de mi mano, enganchándose sus pelitos en mis anillos. Mi ...
    ... mano retrocedió y, con la uña de mi dedo índice rocé el final del escroto de Rafa, allá donde se une a su ano; en esa tensa, oscura y suave piel hice una línea con mi uña… al sentir Rafa mi uña contrajo sus cachetes y se corrió dentro del culo de Magda, ella gritó al sentir la tensión de un pene expulsando dentro de ella (su primera "inyección" de hombre), como se corrió rafa, el culo de él se quedó plano en el momento justo de contraer sus músculos, justo de soltar su leche en el ano de Magda. Se la sacó, y al sacarla, del ano dilatado de ella comenzó a fluir un hilo de leche blanca y algo espumosa. Dos días estuvo Magda en mi casa; dos días en los que la tuve limpiando, ¡limpio sobre limpio!; la penetré con un arnés, cosa que me encantó. Invité al chico acomplejado de la panadería para que tuviera su primera vez con ella; el muchacho no se lo podía creer (se me ocurre cada cosa). Delante mía la penetró, pero él se la metió por la vagina. El muchacho tiene un pene muy torcido, que no fue obstáculo para que corriera a Magda tres veces antes de que se corriera él; la cara del muchacho al acabar era una contracción casi mística, la novedad. Ahora Magda está en su casa y, desde hace casi un mes, espera órdenes mías, volveré a dominarla en persona; pero por lo pronto solo le doy órdenes por correo electrónico. Desde su visita ya he dominado a otras sumisas. Cada vez se me ocurren cosas más excitantes que ya contaré, una a una; porque cada sumisa es un mundo. Yo por mi parte me ...