1. (24) Los amores de Ana Etxeberría


    Fecha: 07/03/2018, Categorías: Dominación No Consentido Autor: Mister Neron, Fuente: CuentoRelatos

    40 Hoy tocaba correr para recoger unos apuntes. Ana los necesitaba para las clases de bioquímica general de mañana. Según la dijo Gabriela por WhatsApp, debía ir a la residencia universitaria room 67, y todo antes de la primera clase, así que hoy el desayuno tenía que esperar. Ahí delante tenía la puerta. Ana pegó con los nudillos y un “adelante” hizo que entrara. -Hey, hola –se asomó Ana y lo primero que vio fue a una chica desnuda, amordazada con cinta adhesiva y atada al cabecero de una cama. Su cara de horror cambió al ver a Ana, pensando que la ayudaría. -¿Tú qué coño haces aquí? –apareció un chaval desnudo y velludo. -Es que busco a Andrés Montalvo. ¿Eres tú? -No. -Tenía que darme unos apuntes de bioquímica. -Ah, sí, Andrés, pero no es aquí. Te has equivocado. Es la 77, no la 67. -Oh, perdona. ¿Y esa zorra qué hace ahí? -Me la pienso violar todo el día. ¿A que está buena? -Ya lo creo. Has hecho buena elección. Si se envalentona me llamas y la abofeteo lo que haga falta. -Hey, tú eres Ana Etxeberría, ¿verdad? Conozco tus videos pornos de memoria. -Muchas gracias, polladura. -¿Te quedas? Así violamos a esa perra juntos. -Me encantaría, pero voy con el tiempo encima. Otro día, ¿vale? -Genial. Ana se acercó a la chica atada… -Ojalá te destroce, so puta. … y le susurró esto al oído. La chica se puso a llorar sin consuelo. Sonriendo, Ana se pavoneó delante del chaval antes de salir e irse. -Wow, qué pasote –babeó el chaval. Ana buscó la puerta 77 y volvió a llamar con la ...
    ... mano. -Pasa. Ana accedió al interior y encontrándose a dos chicas desnudas, con máscaras de látex que no dejaban ver ni hablar y colgando del techo de dos gruesas cuerdas. -Vaya, vaya, qué tenemos aquí. -Hola, Ana –salió Andrés del cuarto de baño desnudo y embadurnado de aceite-. Lo tuyo está en esa mesa. -Gracias –vio Ana los apuntes y los guardó en su mochila. Otros tres chicos desnudos se hicieron ver. -¿Vais a montar una fiesta con estas dos? –sonreía Ana con vicio. -Sí, algo así –rió Andrés-. Son dos novatas y necesitan una lección de convivencia en el campus. -¿Qué pasa? ¿Son mojigatas? -Las muy cabronas se niegan a someterse al falo patriarcal. Cuando acabemos con ellas habrán cambiando de actitud. La letra con sangre entra. -Bien dicho, Andrés. ¡Choca! –puso Ana el culo y Andrés lo palmeó. -¡Yeah! -Me gustaría quedarme, pero ya llego tarde a clase. -Pues no vayas. Esto mola más. -Lo sé, pero tengo 4 negativos por faltar. Uno más y me las veo putas. Pero si quieres doy el visto bueno. -Por supuesto. Ana se arrimó a las dos chicas y las examinó. -Son dos buenos ejemplares. Con la mano abierta azotó el culo de una con virulencia y haciendo lo mismo con la segunda chica. -Culos duros y torneados. Me encanta. No me importaría violarlas a las dos, pero se acercan los exámenes finales y tengo que apretar. -Eres fantástica, Ana –reconoció Andrés. -¿Nos regalas tus bragas? –anheló uno de los chicos. -Lo siento, chicos, pero no llevo. -Qué guarrona –rió el mismo chico. -No lo sabes ...
«12»