Salí de compras - Relatos Eróticos

Salí de compras

... cuatro patas y me abrí las nalgas, "ahí tienes mi ano cariño, para que me hagas gozar por la cola", le dije, dejando que se acomode detrás mio y mordiendo la almohada de placer cuando siento como Paco empezó a meter su verga en mi cola, yo solo gemía y me quejaba a medida que el novio de mi hija metía toda su verga en mi cola, aplastando mis nalgas contra su cuerpo, "tu verga me abre mas el ano que la de mi marido", le decía sintiendo como Paco metía y sacaba su verga de mi ano, disfrutando de como mi futuro yerno me cachaba la cola. Siento como la saca toda y deja caer saliva en mi ano, y la vuelve a meter toda de una sola vez, haciendo que de tal grito de placer como jamás lo di, "cariño, me cachas la cola mejor que mi marido, sigue, sigue no pares, sigue dándome verga por la cola", le decía sacando mas afuera mi cola y abriendo bien mis nalgas, disfrutando de la sensación de sentir su verga entrar y salir de mi ano, mordía las sábanas cuando la metía toda y la movía dentro sin sacarla, "que rico como me cachas la cola, abre bien mi ano, déjalo bien abierto", le gritaba temblando de placer, "es lo que quiero, dejarte bien abierto el ojete", me decía, casi subido sobre mi y moviendo su verga para los costados, en círculos dentro de mi cola, sacándola y volviendo a meterla fuerte, "hay que me ...

... escurro, sigue, sigue que me escurro", le grite teniendo un fuerte y tremendo orgasmo mientras él no paraba de cachar mi cola, "Mercedes, te has corrido ya?", me grito, agarrando mis caderas con fuerza, "si cariño, llena mi cola de leche", le decía gimiendo de placer, pero la idea de Paco era otra, ya que sacó su verga de mi cola y me la metió en la boca, haciendo que se la mame, hasta que siento los chorros de leche llenar mi boca, el novio de mi hija se estaba escurriendo en mi boca, llenando literalmente mi boca con su semen, "traga Mercedes, traga todo, que placer", decía gritando y disfrutando de como se estaba escurriendo en mi boca y yo empecé a tragar su leche mientras no dejaba de mamar la verga de mi futuro yerno, sintiendo como me acariciaba la cabeza y temblaba, trague toda su leche, lamí bien su verga, jadeaba de placer, "que leche te gustó mas, la mía o la de tu marido?", me dijo, acostándose a mi lado, "la tuya, ya que a mi marido nunca deje que se escurra en mi boca, tú has sido el único que le he tragado el semen", le dije, pasando una pierna por sobre las suya y nos abrazamos, relajados los dos en la cama que comparto con mi marido, en esa cama le había metido los cuernos e iba a dormir con otro hombre que no era él, ya que le dije al novio de mi hija que se quede a dormir conmigo.