1. En el baño de un taller mecánico


    Fecha: 25/03/2018, Categorías: Sexo con Maduras Sexo Duro Tabú Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    Ese fin de semana me había quedado nuevamente sola en casa. Para variar, mi adorado Víctor había tenido que viajar al interior.El sábado por la noche Helena y Camila me propusieron una salida “de chicas” y acepté con gusto; amabas estaban dispuestas al levante y a reventar la noche; pero yo estaba segura de que esa noche iba a dormir sola en mi cama…Tomé demasiados tequilas en el boliche, bailé con varios admiradores y me dejé acariciar el culo por otros; pero ninguno de esos gavilanes rapaces me convencía como para entregarle mi cuerpo. Cuando casi amanecía, me di cuenta de que mis dos amigas habían desaparecido del lugar. Busqué a ambas por todos los rincones posibles, pero fue inútil. Las había visto por última vez bailando muy acarameladas con sendos mocosos y me imaginé entonces que ahora estarían en la cama de ellos…Cuando salí del lugar me encontraba un poco mareada por el efecto del alcohol. Recordaba que había llegado hasta allí en mi propio auto, pero los vahos etílicos me habían desorientado bastante y tuve que dar varias vueltas tratando de encontrar dónde lo había dejado estacionado.Ya estaba por salir el sol; así que decidí que, tomar un café bien cargado en alguna estación de servicio, me devolvería un poco de lucidez para reencontrarme con mi auto perdido…De repente sentí unos tremendos retortijones en el estómago y me di cuenta de que necesitaba un baño con urgencia. Pero no podía encontrar ninguna estación de servicio y todos los negocios alrededor todavía ...
    ... estaban cerrados a esa hora.Comencé a sudar frío, ya no aguantaba más el dolor, cuando de repente aparecía frente a un taller mecánico, cuyas puertas estaban abiertas de par en par. Entré y pude ver un cartel indicando que los baños estaban al fondo.Casi doblada en dos por el dolor, me crucé con tres hombres. Les pedí que me dejaran pasar a su baño, diciéndoles que tenía una urgencia.Ellos solo asintieron con la cabeza y me dieron el paso. Al pasar entre ellos sentí que me desnudaban con la mirada; aunque no hacía mucho esfuerzo para hacerlo. Yo llevaba una breve minifalda, una liviana camiseta de algodón y unos tremendos tacos altos. No me había puesto nada de abrigo, porque la noche había sido bastante cálida.La puerta del baño estaba torada y no conseguí abrirla yo sola. Uno de esos tipos se acercó y apoyó su entrepierna contra mis nalgas, mientras sus manos rozaban mi cintura y abrían con facilidad la puerta.Entré lo más rápido que pude sin cerrar la puerta, ya que no aguantaba más y el hombre pudo ver cuando levantaba mi falda y me bajaba la tanga hasta las rodillas. Me senté en el inodoro y miré hacia arriba, encontrando la mirada libidinosa de ese tipo. Le pedí que cerrara la puerta…Al terminar, noté que mi falda se había manchado con la suciedad del piso; algo típico en un taller mecánico, donde había grasa y aceite por doquier…Me quité la falda y estuve un largo rato mojándola en el lavatorio, tratando de eliminar esas manchas. Alguien tocó a la puerta, preguntando si ...
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