1. Juan


    Fecha: 03/04/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Siento que te conozco desde hace mucho tiempo y en realidad no ha pasado tanto, pero es que desde hace mucho tiempo tenía ganas de conocer a un hombre como tú. Me encantas, me haces desearte con sólo platicar contigo a través de la computadora. Siento que mi concha se moja cuando simplemente te oigo al teléfono... cómo me gustas. He decido visitarte en tu oficina, me dijiste que día estarías solo en ella, para poder tener intimidad, pero, no te aviso que voy a llegar, sino simplemente que tal vez lo haga. Quiero darte una sorpresa, que te dure mucho tiempo. Y que a mí me ayude a apagar las ansias locas que tengo por ti. Llego a la dirección que me diste, toco impaciente a la puerta, y espero... no tardas mucho, veo en tus ojos que me reconoces perfectamente, y que te gusta lo que ves, me dices, "alma" y con solo esa palabra sellamos nuestro encuentro, me invitas a pasar tomándome de la mano y jalándome hacia adentro, apenas cierras la puerta y sin soltarme me arrinconas contra ella para empezar a besarme en forma atrevida, primero en la boca, unos besos apasionados y llenos de deseo, luego en mi cuello, qué rica sensación, quieres empezar a desnudarme, pero te detengo con mis manos y te pido que me acompañes, hay un sillón en tu sala de espera que se ve muy cómodo, te pido que te sientes y al hacerlo, empiezo a desabrochar lentamente todos y cada uno de los botones de tu camisa, la abro y descubro ante mi un tórax fuerte y antojable. Cómo me entretengo acariciándolo, y más ...
    ... que nada, dando pequeños pellizcos en tus tetillas que al instante responden a mis caricias y se ponen tiesas denotando tu excitación, quieres tocarme, pero yo quiero disfrutar de ti, así que te pido que dejes tus manos quietas un momento, sigo bajando y explorando y me encuentro con la barrera de tu pantalón, me deshago de él en forma rápida, y quito también tus calzones tipo bikini, justo los que te había dicho me excitan tanto, qué hermosa verga aparece ante mí, una lanza firme en sus 16 deliciosos centímetros, que me empiezan a volver más loca, quiero comérmela, así que no espero más y me lanzo sobre ella, ¡qué rica está! Tan excitada, tan mojada que tus jugos empiezan a escurrir en mi boca, los siento deliciosamente al estártela mamando, la cabeza de tu pene brilla por las lamidas que le estoy dando, qué hermoso disfrute, pero tú ya no aguantas y me levantas para apoderarte de mi ropa, me quitas la blusa apresuradamente y luego el brassier, sacas mis grandes tetas de su prisión y empiezas a devorarlas con ansias, pones mis pezones tan duros que me duelen pero qué rico duelen, me muerdes y me pellizcas suavemente mis tetas, y luego te apuras en subirme la falda. Miras mis calzoncitos que como quedamos son unos bikinis que te han gustado en mi fotografía, como te había prometido, traigo unos nuevos porque te los quiero dejar en prenda... te apresuras a quitármelos y a empujarme ahora suavemente hacia el sofá... te inclinas hacia mí, y empiezas a besarme nuevamente, dices que ...
«123»