La Promesa el Inicio - Relatos Eróticos

La Promesa el Inicio

Hola soy un gran fanático de la página, saludos, desde Venezuela cumplí ya mis 23 años, mi relato sexual vamos a inventar, uno pero inspirándome de mi propia vida, no soy de compartir mucho mis aventuras pero de sus comentarios que me hagan, les hablare un poco mas de mis historias eróticas jajaja; me animo a escribir porque algunos aquí de verdad me gusta la forma de como escriben y el cómo nos sumergen en la historia más de uno me ha calentado y he debido de masturbarme ya no más charla empezare, espero les guste. Daniel siempre ha sido un chico tímido he inteligente ya ha cumplido sus 15 y todavía no ha conocido el amor, su tez es de color blanca, ojos verdes que de alguna forma muestran los pensamiento que el oculta, un poco alto de 1,70 delgado y tonificado grandes nalgas, odiadas por el mismo, era burla para sus amigos y para su propia familia, eran su genética, el chico solo vivía en sus libros, era excelente en el estudio, pero un mal deportista, como todos tenemos aptitudes para una cosa y para otras no. Estaba de nuevo sentado en su pupitre sumergido en su lectura, para olvidar y bloquear a sus compañeros de clases, sentía que no compartía nada con ellos, siempre vivían burlándose y haciéndole daño; como hoy casi nunca iba hacia el baño del colegio por el bullying escolar que sufrían algunos alumnos, entre esos alumnos él; ya se dirigía al baño cuando Ethan entro un chico alto, musculoso lleno de vellos por todo el cuerpo de ascendencia africana pero de madre ...

... rusa, por eso tenía unos ojos color gris , pelo ondulado de castaño oscuro, por eso vivía con un corte rapado y unos labios carnosos con una pequeña cicatriz en su ceja, que lo hacía ver más salvaje todavía , como de unos 17 años. -Ethan, hola Daniel ¿cómo estás? Hace tiempo no te veía por estos lugares, acaso se te olvido el pequeño baño de agua de excusado que te di, su sonrisa maliciosa aun le desagradaba más a Daniel con su labio temblando de miedo y su cuerpo casi encogido se sentí frágil dañado como un adorno que cualquier golpe, lo haría autodestruirse por completo, titubeando aun con la pequeña voz temblorosa que tenía por su pánico, este no, noo…; Ethan soooolo pasaba por aquí necesito ir al baño. Bueno hoy me encontraste muy complaciente, Daniel ya que te doy cinco minutos para que vayas y quiero que vuelva al terminar ese maldito tiempo; su mirada llena de rabia, hizo que Daniel tragara saliva como si fueron fragmentos de vidrio en su garganta, está bien, como pudo orino, aun sabiendo que Ethan, estaba contando su tiempo se sentía miserable, vacío y lleno de miedo que de alguna forma sus padres se lo incitaban más al pelear, cada día y desahogando su rabia con el probé chico, Ethan susurro como si cantara oye Daniel el tiempo se acaba y te necesito. Como pudo subió su cierre con esa manos, que eran como gelatinas, estoy listo bueno ahora puedo irme, la verdad Daniel tengo algo que proponerte, ummm de nuevo el pánico se apoderaba de él chico, ehhh bueno dime, si lo ...