1. SEXO NOCTURNO EN LA PLAYA


    Fecha: 01/06/2018, Categorías: Gays Autor: richard kajagoo, Fuente: RelatosEróticos

    SEXO NOCTURNO EN LA PLAYA Cuando tenía 18 años (allá por los 80’s), con un grupo de amigos del colegio nos fuimos de campamento por Semana Santa a la Costa Verde, en realidad, no conozco una sola generación de jóvenes limeños, que no tenga por costumbre aunque una vez en la vida, irse de campamento por Semana Santa (más conocida como “semana tranca”), debido a las monumentales borracheras que se suceden en estas fechas. Por lo general, los lugares preferidos son Markahuasi, Huachipa, Huacho, las playas del sur, etc. En nuestro caso, nosotros decidimos pasarla “misiamente” en el circuito de playas de la Costa Verde. Exactamente porque escogimos ese lugar no me acuerdo, pero igual cumplimos la “rutina juerguera”: llevamos un par de carpas, minicomponente, ron a discreción, botellones de gaseosas, papitas, galletas, atún, etc, etc… todo lo necesario para la juerga del fin de semana. Éramos un grupillo de 11 personas entre hombres y mujeres, un par de parejas, amigos con derechos, vacilones… en fin, que éramos un grupillo que prometía buena juerga. Por esas cosas de la borracheras, conversando de política (nunca hablen de política cuando estén en tragos, sea la edad que tengan), terminé peleándome con un par de compadres, nos mandamos a la mierda, así que asado me alejé del grupo y comencé a caminar por la playa para despejarme un poco. Eran más o menos, las 11 de la noche, y los que conocen el circuito de playas, saben que el lugar se presta para el sexo furtivo. Hay diversas ...
    ... playas de estacionamientos diseminadas a lo largo del circuito de playas, y es bien sabido el sexo a discreción que se practica por ahí. Bueno, la cosa es que acercándome a una de estas cocheras, divise un auto que ondulaba de manera sospechosa. Como dice la canción de Pedro Suárez-Vértiz, ese auto era una rana saltando sin parar. Señal inequívoca de que ahí había alguna parejita tirando como locos. Ya ganado por el morbo, decidí bordear el auto para entretenerme viendo a una parejita follar, rodeé otro auto que se encontraba a unos 10 metros de este para tener una mejor visión y grande fue mi sorpresa cuando al ocupar el lugar estratégico, me encontré cara a cara con un tío que había tenido la misma idea y estaba que disfrutaba del espectáculo en primera fila mientras se sobaba una maravillosa verga de unos 18 cms. Un poco que se sorprendió cuando yo aparecí, pero inmediatamente, al ver que yo también iba de mirón, me hizo una señal de silencio con los dedos y continuó a lo suyo, mirando y masturbándose. Yo en ese momento estaba con una casaca cortaviento azul, un polo dentro, short ceñido (eran los 80’s), y zapatillas. De donde estábamos teníamos una visión directa de una pareja de hombres, un tío de unos 40 años sentado en el asiento de atrás, con la puerta abierta y un chiquillo, una loquita, de unos 18 años sentado encima de la verga del tío moviendo acompasadamente las caderas al ritmo de la música que sonaba en el radio de auto. Yo disfrutaba viendo el espectáculo pero ...
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