1. Helena, yo y dos negros cubanos


    Fecha: 07/06/2018, Categorías: Sexo con Maduras Sexo Duro Sexo Interracial Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    Helena, yo y dos negros cubanosDespués de ese primer día en Cuba, mi amiga Helena no se había quedado satisfecha con la tremenda cogida que le había dado el enorme negro Edmundo y todavía quería más. Por eso, a la noche siguiente, me pidió que saliéramos a caminar por la rambla para ver si encontrábamos algo más “para entretenernos”, según me dijo sonriendo con cierta picardía…Caminando en medio de la oscuridad, repentinamente aparecieron dos hombres negros enormes de aspecto muy impresionante que se acercaron a nosotras sonriendo. Iban vestidos con pantalones vaqueros, camisetas negras y botas.Cuando estuvieron casi encima de nosotras, pudimos apreciar que impresionaban bastante; tenían todo el aspecto de ser tipos muy peligrosos, pero nosotras no nos sentíamos intimidadas por nada. Estábamos allí esa noche con la intención de pasarlo bien y, si se daba algo, tener una aventura con algún hombre interesante.Nos invitaron a entrar a un boliche que estaba justo cruzando la calle. Helena me miró y por supuesto asentí que por mi lado no había problema…Entramos directamente a la pista principal de la discoteca. Estaba todo oscuro, la música sonaba a tope, ensordecía, y había muchísimas parejas bailando.Nos dedicamos a bailar un buen rato con los dos negros, que lo hacían con mucha gracia y luego ellos nos arrastraron fuera de la pista, hasta una especie de apartado donde la música no era tan estridente y se podía hablar.Nos convidaron unos tragos y pronto pude sentir las ...
    ... manos de uno de ellos acariciando mi cintura. Miré de reojo a Helena, que estaba sentada frente a mí y pude ver que el otro negro ya metía sus manos por debajo de la breve pollera de mi amiga. Ella me miró sonriendo y abriendo sus labios para suspirar, mientras los dedos del hombre ya seguramente se metían entre sus labios vaginales.Un rato después mi calentura me indicaba que iba a explotar y cuando los negros sugirieron salir de allí para ir a un lugar más tranquilo, nosotras ni siquiera lo dudamos.Nos llevaron directamente a un pequeño edificio cercano, donde subimos a un primer piso. Allí el negro que estaba acariciando a Helena abrió una puerta y arrastró a mi amiga adentro. El otro abrió la puerta de la habitación contigua y me invitó a entrar, dándome una palmada en mis nalgas cuando pasé frente a él…El lugar era espantoso. Totalmente oscuro, con una pequeña cama en el centro y una mesa de luz al lado, un gran ropero en una pared y nada más.Cuando giré, me di cuenta de que el negro ya se había quitado la camiseta.Vi que un gran tatuaje de su brazo se extendía a gran parte del pecho. Me acerqué a él, acariciando con mis dedos el dibujo de la piel negra. Sonrió y bajó sus manos por mis cabellos hasta la espalda, me acarició la cintura y subió las manos levantando mi camiseta para quitármela. Mis tetas quedaron al descubierto, ya que esa noche no llevaba corpiño. El gigante negro me apretó contra él, aplastando mis pechos contra su pecho, me agarró por la nuca y me besó ...
«1234»