1. Sexo en la oficina (1)


    Fecha: 13/06/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... tendría la verga bien parada pues a cada momento volteaba a ver entre mis piernas y con esa faldita tan pequeña era inevitable enseñarle mi ropa interior. Llegó la hora de la salida y con ello el momento de ir a comer con el licenciado, el personal se empezó a retirar y solo quedaba él y yo así como la chica que vigila los teléfonos en el horario de comida mientras llega el personal vespertino, salimos de la oficina rumbo al estacionamiento para abordar su auto, mi jefe caballerosamente me abrió la puerta del auto para que yo lo abordara, pero también con la intensión de verme las piernas, así que al subir abrí las piernas lo suficiente para que él pudiera ver nuevamente y ahora con mas claridad la totalidad de mis muslos y la tanguita que cubría mi palpitante vulva, durante el trayecto a cada oportunidad mi jefe volteaba a ver mis extremidades inferiores que por lo pequeño de la falda están al descubierto, yo fingía no darme cuenta. Ya en el restaurante mientras comíamos platicamos de varias cosas y entre ellas de los gustos de cada cual y cuando mencionó que le atraían las mujeres que usan lencería pequeñita y provocativa, además que le cautivaban las chicas que tenían mucho vello pubico, en ese momento sin meditarlo, cometí la imprudencia de decirle que yo siempre usaba ese tipo de lencería y le describí algunas prendas que uso, diciéndole también que acostumbraba usar liguero y medias cuando no me ponía minifalda, así mismo le dije que era muy velluda de la pelvis, él ...
    ... se interesó mucho en eso y en son de broma pero con mucha malicia me dijo que le gustaría verme con esa lencería y admirar mi monte de Venus cubierto de vello, le seguí la broma en el mismo tono diciéndole que un día de estos se lo permitiría. Terminamos de comer y aun cuando insistía en llevarme a casa insistí en que solo me acompañara a tomar un taxi, cuando éste llegó, se despidió de mí dándome un beso en la boca que correspondí tímidamente y al abordar el auto le mostré generosamente entre mis muslos separándolos un poco mas de lo necesario. Durante el fin de semana no deje de pensar en él y en todo lo que estaba sucediendo e inconscientemente volví a tener la fantasía erótica con él mientras mi esposo me cogía, el domingo por la noche me puse a pensar que ropa me pondría para ir a trabajar al día siguiente y la actitud que tomaría ante los hechos sucedidos el viernes anterior, siempre pensando en agradar a mi jefe y porque no, provocarlo sexualmente, elegí un pantalón blanco que me quedaba dibujado al cuerpo, sin bolsas por atrás ni por delante y se ajustaba con un delgado cierre lateral, debajo de él llevaría unas diminutas pantaletas totalmente de encajes también en color blanco con la finalidad de que se me marcaran de manera clara para demostrarle el tipo de pantaletas que acostumbraba usar, en la parte superior, brassiere de media copa elaborado en encajes también en color blanco y encima una blusita corta semitransparente para que pudiera ver mi sostén, para evitar ...