1. Mi querida golden retriever


    Fecha: 27/06/2018, Categorías: Zoofilia Autor: animafilico21, Fuente: SexoSinTabues

    ... algo insospechable. Esa mañana empecé como cualquier otro, me levante y derecho fui a bañarme, me lave los dientes y después desayune, recuerdo que fue huevos fritos con pan y jugo de manzana, también recuerdo que tenia vestido una franelilla blanca, boxers azules, con mis típicas pantuflas, todo a lo muy cómodo y fresco. Estaba de lo mas tranquilo leyendo una cosa por Internet cuando sin querer tumbe el baso de jugo en la mesa y el jugo había ensuciado el comedor mi auto reflejo fue agarrar la laptop antes que se mojara, pero algo de ese jugo también termino cayendo a mi entre pierna, me levante, puse la laptop en otro mesa de la sala y fui a buscar un trapo a la cocina, la perra en todo ese tiempo ni se movía, yo estaba para acá y para allá solo para limpiar bien el desastre y para que no quedara pegostazo. Después de limpiarlo todo decidí ir a bañarme nuevamente, para quitar el jugo de manzana de mi entrepierna, fui a la habitación, me desvestí agarre otra toalla y me dirigí al baño, como no estaba nadie en casa salí de la habitación desnudo, pero al salir me tope con Candy. No se si el olor a manzana estaba muy fuerte pero el caso es que inesperadamente me empezó a lamerme el pene. Sorprendido, trate de apartarla con los brazos y decirle que no lo hiciera pero era inútil, estaba de lo mas concentrada lamiéndome el pene, y la cosa era que me estaba gustando, esos lametones seguidos y rápidos hacían que mi pene empezara a erectar, me llego a gustar tanto que no forceje ...
    ... mas con ella y retrocedí hasta mi cama (cosa que ella me siguió sin dejar de lamer) que rico se sentía, además que en la zona que se enfocaba en lamer era la cabeza del pene, creo que por mi dejaría que lo lamiera para siempre, era un deliciosa sensación. Después un pensamiento entro a mi mente ¿Cómo se sentirá hacérselo a una perra? Que ¿Sienten los perros al aparearse? Era el momento justo para saberlo y con lo caliente que estaba ya nada me detenía, ni la razón ni nada. Con una mano rodee la parte baja de su cadara y con la otra empecé a acariciar la entrada de su vagina, la cual estaba hinchada, eso me daba a idea que estaba en celo, lo cual me dio mas morbo, ya que pensaba en hacerla mi perra y yo su macho, cuando empecé a penetrarla de a dos dedos, ella se volteaba con la intención de lamerse la vagina pero no la dejaba, después de un rato dejo de hacerlo, acto seguido me arrodillé a su altura y empecé a metérselo poco a poco, hasta que todo mi pene quedo dentro de ella, ella solo me miraba de una manera extrañada, pero no lloriquieba ni nada, la sensación dentro de su vagina me dejo perplejo, me apretaba dentro peor no me incomodaba y además sentía su calor corporal dentro, y empecé a moverme para penetrarla como se debe, ya nuestra relación no era entre sueño y perra, si no más bien el de dos animales apareándose, ella no dejaba de mirarme y yo por lo caliente que estaba le dije “vez Candy, ahora eres mía en todos los sentidos”, Luego de estar un rato así me separe de ...