EL HOTEL DE LIGUE - Relatos Eróticos

EL HOTEL DE LIGUE

... esa verga hasta el fondo de mi garganta, mientras el tipo de la fila de butacas de atrás no dejaba de manosear mis nalgas y mis piernas, así estuve unos 10 minutos y después el tipo me detuvo preguntando: Traes condones chiquita? ¡Te quiero coger! de inmediato suspendí la mamada, saque un condón de mi mochila y se lo puse con la boca, después me puse de rodillas sobre la butaca dándole la espalda y quedando de frente con el que estaba en las butacas de tras, el tipo se puso detrás de mí y me la metió despacio, hooo que deliciaaaa, movía mis caderas en círculos, y él sujetaba mis nalgas y se movía de adelante hacia atrás, cada vez con embestidas mas intensas, asiiii asiii le gritaba yo antes de tener la verga del otro en la boca, debía aprovechar esto, seguramente dejaría que se vinieran y después me vendría yo, antes de que el último terminara, mis gemidos eran intensos y los de mis cogedores igual, todo iba genial y de repente por atrás de mi llego el vigilante del cine, ¿Que paso? no te dije que no se pude coger aquí, ¡Te voy a sacar, vístete! todos nos incorporamos, y los tipos que me tenían ensartada trataron de defenderme. Ya déjalo poli, nos estamos divirtiéndonos todos, ustedes no se metan, y llamo a otros dos tipos mas por su radio, mientras eso pasaba aproveche para ponerme pantalones, cuando llegaron los otros dos tipos a apoyar al vigilante, mis cogedores decidieron esparcirse, y dejarme solo, muy a mi pesar y con mucha pena tome mi mochila y me salí del cine, ...

... escoltado por los tres, jamás en toda mi vida de andar cogiendo clandestinamente me había pasado algo así, me sentía mal, mas por que no había llegado a mi orgasmo y me sentía con ganas pero frustrado, camine hacia el metro y al llegar a la primera esquina un tipo mayor que yo, como por 10 años más, me abordo, hola disculpa, hola respondí, no te quiero molestar, yo. bueno yo estaba dentro del cine, y vi cuando esos tipos te sacaron, haaa, la verdad me dio un poco de pena, pero seguí platicando con él, la verdad vi cuando te estaban cogiendo y estaba esperando a ver si cuando uno de ellos terminara me dabas un chance de sentirte, te ves buenísima en lencería, como me lo estaba diciendo en plena calle, me dio más vergüenza aun, y decidí caminar hacia la alameda central, ya mas aislados platicamos de nosotros, me dijo llamarse Eligio, y que era trailero, yo me presente, Alonso y soy aux. contable, ya más en confianza, siguió hablando de mi cuerpo y mi piel, me dijo que era una lástima haberse quedado con ganas, pero que ojala y hubiera otra chance, yo me dije, ¿Y por qué no? Y si vamos a un hotel me pregunto, ok le respondí, ¿Conoces alguno?, si acá cerca por donde estaba el Viana del metro salto del agua hay uno, abordamos un taxi por que estábamos algo lejos para caminar, llegamos, el barrio se apreciaba muy intimidante, como de mala muerte, el hotel como cualquiera de los de paso, entramos y para mi sorpresa la Señora que nos dio la habitación no hizo ningún comentario como si ...