1. Cristian: mi tercera vez.


    Fecha: 07/07/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... asco mi mugre?? - me dijo desafiándome - No es eso, es solo que. - Entonces ven y siéntate conmigo - me dice interrumpuéndome. Ya "convencido" me siento a su lado, en eso empieza una de esas luchas nuestras, yo termino poniéndome sobre su pene, pero rápidamente cambia nuestras posiciones y él queda arriba, eso me estimula y tengo otra erección. - Vaya, tu sangre si que es caliente papi - me dice - Mira, ya se me paró también. Yo río y lo beso, lentamente sale de la tina y me lleva hacia la ducha, ése momento fué mágico, tal y como en una película, dos novios bajo la ducha besándose, de pronto Cristian estira el brazo y toma una botella de acondicionador para pelo, me sentí algo confundido al principio, pero entendí lo que me quería decir cuando cubrió mis manos con esa sustancia grasosa y me dió la espalda, levantó su culito redondo, peludo y mojado. En ese instante lo ví de otra forma, tan perfecto, redondo, mordisqueable, un cosquilleo en mi pene me hizo perder la cabeza por un rato, pero cuando regresé me arrodillé ante esa maravilla. Con mis dedos lubricados, acaricié toda su raya, desde arriba, hasta sus testículos que colgaban al frente. Se agachó y pude ver su ano, algo dilatado, pulsante y cubierto por esos vellos que me volvieron loco desde que los ví, suavemente lo acaricié y viendo que ya estaba algo abierto, me puse un poco más de acondicionador en los dedos y metí un dedo, Cristian sólo respondió con un suspiro placentero, después de un rato metí otro, teniendo ...
    ... la misma respuesta, me animé a meterle un tercer dedo, el cual le arrancó un gemido muy varonil para lo que le estaba haciendo. Ambos estábamos disfrutando de ese momento, cuando me dice: - Es la hora bebé, hazme tuyo, quitale la virginidad a mi culo, pero, por favor, hazlo despacito al principio. Entre la ropa que había metido al baño para vestirse traía un par de condones, los saca y me puse uno, con una maestría que me sorprendió después porque en ése instante estaba muy excitado para notarlo. Bien lubricados mi pene y su ano, comenzé a penetrarlo suavemente como me lo pidió, pero estaba super abierto, le entró a la primera toda mi verga que al sentir el calor de sus entrañas y sus vellos cosquilleando mis huevos se endureció de una forma monstruosa. No pude controlarme, solo la primera metida fué suave, pues sus gemidos graves me encendieron como nunca antes, todo había sido tierno y encantador, pero no esta vez, en ese instante podía sentir mis instintos a mil. Un vigoroso mete y saca comenzó, me sentía poseído por una sed de sexo que no había sentido, sus gemidos tan profundos me hacían sentir que me cogía a un verdadero macho, simplemente no pude detenerme o pensar o hablar siquiera. Estaba intoxicado de pasión, en ese momento de tanto placer para ambos, solo lo abracé y lo acerqué hacia mí, fué un poco menos profundo pero muy placentero para ambos, lo sabía debido a sus gritos de placer y a las contracciones que tenía, cuando de pronto me dice: -Ya vienen. los voy a ...