La gran orgía en Barcelona (primera parte) - Relatos Eróticos

La gran orgía en Barcelona (primera parte)

... acompañaron al hotel donde esperaban Carol y su novio Mark y yo debía parecer muy deprimida porque se preocuparon mucho por mí, con las ilusiones que me había hecho (por no hablar del gasto) y ahora era un poco tarde para buscar otra pareja en condiciones, casi me pongo a llorar. Mark me propuso que probara de llamar al tipo de la segunda cita, a Juan, a ver si había tenido más acierto al escoger a mi segunda opción, y se diera el caso que Juan estuviera de acuerdo en adelantar la cita. Me pareció buena idea y le di el número a Mark para que llamará el, Juan accedió a cambiar el día de la cita y 30 minutos después estaba en el hall del hotel. Yo me quedé en la habitación con Carol y mi hermana, muy nerviosa por si resultaba otro chasco. Mark y Fabiola bajaron a recibirle, Fabiola me llamo por móvil y me enseñó por video-llamada a mi segunda cita y esta vez sí, el tipo es mayor, eso sí, unos 45 años o quizás más, pero con ese aire a lo George Clooney que me encanta! y unos ojos verdes muy bonitos! Me volvió la alegría y suspirando aliviada, les pedí por favor que subieran. Una vez todos en la suite, ya habíamos pensado que para romper el hielo y para aprovechar los servicios pagados de la habitación, íbamos a cenar todos juntos en la suite y que cuando viéramos que todo iba bien, y nos cogiéramos mutua confianza, Fabiola y mi hermana se marcharían a sus respectivas casas y nos quedaríamos Carol y su novio en una habitación y mi cita y yo en otra de las habitaciones. Así que ...

... nos sentamos en los fosas a tomar algo de bebida y charlar y después alrededor de la mesa a cenar cuando el servicio subió la cena. Todo iba muy bien. Estaba muy cómoda y la conversación fue muy agradable y amena. Después de la cena, con la confianza y la bebida, la conversación fue subiendo de tono poco a poco y en un momento determinado, mi cita propuso jugar a un juego, el juego de la rueda, el tipo llevaba en el móvil una versión (modificada por el mismo) de una aplicación que simula el juego. Di un respingo en la silla, ya conocía ese juego, pero este planteamiento cambiaba bastante el esquema que tenía pensado, ya que, en vez de relacionarnos cada uno con nuestra pareja, yo con Juan y Carol con Mark, lo que Juan estaba planteando implicaba compartir pareja y por lo tanto igual podía tocarme hacerlo con Mark según lo determinara la suerte del juego. Yo por supuesto que estaba dispuesta, como ya sabes, pero lo verdaderamente sorprendente es que antes de que yo pudiera abrir la boca, Carol y Mark aceptaron la propuesta sin dudarlo ni un momento!, lo que me hizo pensar dos cosas; que a Carol también le gustaba Juan y, lo mejor de todo, que a Mark le apetecía hacerlo conmigo! No sé si conoces la Rueda, es un juego de retos sexuales. Cada jugador, por turno, ha de realizar algo que la suerte le indique, normalmente con otro jugador del sexo opuesto o pagar prenda si no se ve capaz de hacerla y la rechaza (nadie está obligado a hacer nada que no quiera, y si no quiere pagar ha ...