Mi Profesor de Química y Yo Hicimos Reacción. Una Aventura Más En Plena Carretera - Relatos Eróticos

Mi Profesor de Química y Yo Hicimos Reacción. Una Aventura Más En Plena Carretera

... cuando empiezan a pitarme y gritarme, eey Angel esperame no te muevas, volteo a ver, y sí, efectivamente era mi profesor, aquel hombre que me traía loco, feliz y me hacía experimentar un sinfín de emociones, (casualidad, destino, no sé cómo le quieran llamar pero era increíble las cosas que nos pasaban juntos). Se estaciona adelante y por ende corro hasta donde está el, subo a su carro, como era de esperarse me da la mano, y un beso en los labios, que siempre sentía delicioso cuando sus bigotes y barba rozaban cada parte de mi cuerpo. D- Mi Angelito (era como siempre me llamaba), te hacía con tus amigos, me dijiste que te quedarías a dormir aquí en villa y no te quise molestar pensando que estarías ocupado con ellos, yo saliendo de la SEP fui con los compañeros de trabajo y te habrás dado cuenta que también me tomé mis copas. A- Lo que pasa es que pues es temprano y aún estaba a tiempo de irme a Cárdenas, y ya solo quedábamos como 4 personas, y pues yo quiero dormir en mi cama, o la tuya y tiré una leve carcajada…. Platicamos algo y me llevo a cenar, compramos un six de cerveza para el camino, de Villahermosa a Cárdenas es una hora de camino aproximadamente. Si algo me encantaba de Dionisio era su forma de ser espontanea, en el carro manejaba yo o el, e intercalábamos sexo oral, besos, masturbación mutua, e íbamos jugando en todo el camino, obvio todo con precaución para eso ya eran como las 11pm, íbamos entrando a Cárdenas, cuando me dice que aún quedaba una lata de cerveza ...

... para cada quien, y que diéramos un rol y después me llevaría a casa. En eso tomo la dirección la carretera Cárdenas- Coatzacoalcos, se fue por toda la carretera, seguíamos con los besos puesto que ya era muy noche y todo obscuro, íbamos en la carretera cuando decide estacionarse y me comenta que tiene muchas ganas de orinar, veo que termina de hacer sus necesidad, y en vez de regresar a su asiento, da la vuelta y llega a mi puerta, con el cierre abajo y su pene de fuera. D- Hazlo como tú sabes hacerlo mi amor, comételo y disfrútalo, Se inclina me da un beso en los labios, pone un poquito de saliva en mis labios y me pasa el glande por los labios me da ligeros golpecitos en la cara en la boca, y me le empiezo a lamer e introducirme por completo su pene, si algo le encantaba era que yo le hiciera garganta profunda eso lo enloquecía, y me agarraba por los cabellos y literalmente penetraba mi boca, las arcadas y lágrimas eran inevitables. Pensé que ahí terminaría todo. D- Bájate del carro y bájate el pantalón y bóxer a la altura de las rodillas y ponte de 4 en el asiento. Siempre haciendo caso a todo lo que decía, me coloco en posición de la famosa llamada perrito, y si de por si la adrenalina me tenía al máximo, sentir su lengua en mi ano, su barba raspar mis nalgas y como mordía mis pompas, espalda y cuello en lo que el metía uno, dos y hasta tres dedos para la dilatación, mencionando que su pene era de casi 19cm pero muy grueso, y sus testículos totalmente morenos y pesados. ...