Mis adorados sobrinos…Parte XIV...”Y continuaron mi mujer y sobrina”… - Relatos Eróticos

Mis adorados sobrinos…Parte XIV...”Y continuaron mi mujer y sobrina”…

Mis estimado amigos, esa tarde redescubrí a mi mujer y a mi sobrina, me encanto saber de toda su pasión y de su agradable bisexualidad, las disfrute y las sigo disfrutando ahora, ojala sigan disfrutando como lo hago Yo… Mi mujer que estaba boca abajo y con las sabanas apretándole sus ricas tetas se giró de lado también y se quedó mirando a Ema, como admirando su belleza joven, sus hermosos rasgos juveniles que eran perfectos y puros, ella estaba ahí, con sus ojos cerrados y respirando agitadamente, abrió sus ojos y entonces mi mujer le sonrío y continúo explorando su cuerpo joven, se permitió seguir la curva de la delgada y lisa garganta de Ema, se demoró cuando sus ojos aterrizaron en los pechos atrevidos de ella, eran grandes y se veían atrevidos, tenía los pezones rosas y duros que subían y bajaban al son de su respiración agitada, los ojos de mi mujer siguieron el viaje por encima del estómago plano y firme, sobre su piel bronceada y brillante por el sol tomado en estas vacaciones, luego tomo una respiración profunda cuando miró fijamente el monte de venus de mi sobrina, con los perfectos muslos que entonaban con el resto del cuerpo, con esas piernas largas que parecían seguir para siempre, y bien formadas, algo la hizo llevar los ojos hacia la cara de Ema, y ahora ella estaba mirándola, mi mujer le sonrío y ella le dijo. …ay tía siento que me penetra con su mirada, …y me gusta sentir su mirada tía, …me gusta saber que me desea, le dijo, Mi mujer la jalo dándole vuelta y ...

... apoyo en ella sus pechos maduros apretándolos en la espalda de mi sobrina y sus pezones alcanzaron el máximo tamaño, los cabellos de mi mujer cayeron encima de los hombros lisos de Ema, sus manos resbalaron hacia la parte baja de la espalda con los dedos extendidos acaricio extensamente hasta que las puntas llegaron al culo atrevido, pronto los dedos se encontraron en cada nalga del culo de Ema, amasando y apretando, siguió camino hacia las piernas, acariciándolas y con los ojos exploro furtivamente la cosita rosa de Ema entre los muslos… Reacomodándose se acostó sobre la sabana al lado de mi sobrina, al tiempo que sus pechos se alzaron más, separo ligeramente los muslos en un esfuerzo débil por aliviar el dolor en su cosita excitada, la respiración se le agito muy rápidamente y mi sobrina se recargo sobre el pecho de mi mujer… Así permanecieron juntas por un rato, con la cabeza de mi sobrina en el regazo de mi mujer y está acariciándole la mejilla, las mentes de ambas mujeres giraban llenas de sus propios pensamientos, vi a mi mujer acariciando la mejilla dulcemente a Ema, hasta que la vi sobresaltarse cuando sintió algo contra su pelvis, miro hacia abajo, y se excito al ver un dedo delgado de Ema jugando ligeramente con la piel finamente rasurada de la cosita de mi mujer, se buscaron con la mirada, sus ojos tenían una mirada diferente, era lujuria lo que se miraba en sus rasgos… No dijo nada, solo abrió aún más extensamente los muslos, sabía que Ema podía oler su excitación ...