1. Mi novia se cogió a mi amiga


    Fecha: 23/08/2018, Categorías: Bisexuales Voyerismo Autor: Zaratustra, Fuente: CuentoRelatos

    ... de reaccionar y quedó agarrotada por el esfuerzo realizado, me subí y me comí un rato las exquisitas y voluminosas tetas de mi amada que lucían unos pezones inusualmente erectos rogando ser succionados. Allí estuve un par de minutos alternando entre teta y teta evitando celos o competencia inútil entre ambas hasta que ya no aguanté y dirigí mi enorme, hermoso y blanco falo de dios griego hacia las fauces empapadas de mi enamorada que soltó un delicioso gemido cuando mi pene terminó de acoplarse en el fondo de su sexo después de una arremetida salvaje que me dejó viendo bizco. Tanta lujuria me motivó a culearmela con un movimiento copular que veía a mi cuerpo arquearse desde las nalgas hasta el cuello. Hermosos los gemidos de mi amada pidiendo guerra hasta que lo sentí venir, me salí de ella, tomé mi posición de combate preferida poniendo mi fusil enfrente de su cara mientras me la jalaba violentamente, y escupí mi descarga de placer sobre la linda cara de mi novia dejando su lindo rostro, cabellera y cuello envueltos de mi blanco y espeso amor. Viendo su lindo rostro lleno de mi, me quedé profundamente dormido. Pero no todo terminó allí, entre el amanecer y la noche abrí los ojos, tenía que ir a orinar urgentemente y me pare de la cama notando que mi chica no estaba en la cama. Se me hizo raro y después de orinar bajé a buscarla. En la sala, el comedor y el hall no estaba, la cocina y ante comedor estaban a oscuras y no había nadie, solo quedaba subir y buscarla en la ...
    ... biblioteca pero tampoco estaba. Sólo quedaba un lugar y era el que no quería ir a ver, el cuarto de visitas, la habitación de Jennifer Capriati. A oscuras y en completo silencio, abrí primero la primera puerta, la que conduce al baño, y todo estaba en penumbras. Di tres pasos y me coloqué enfrente de la puerta de Jennifer y la deslice suavemente hacia adelante, su puerta nunca tuvo picaporte, y la puerta se abrió dejándome ver una fotografía que sigo teniendo grabada en la mente hasta el día de hoy. Con las primeras luces de la mañana asomándose tímidamente por la ventana, yacían dos jóvenes chicas TOTALMENTE DESNUDAS con sus cabezas metidas en la concha de la otra. Se habían quedado dormidas dándose placer hasta dios sabe a qué hora. Admirando su ternura, me quedé contemplándolas un buen rato, ternura que se combinaba con la ferocidad sus cabelleras que enredados mostraban los estragos de un combate feroz entre dos hermosas chicas que se habían comido entre sí en un ritual de sexo puro en donde no podía haber ni amor ni amistad (por la falta de comunicación de dos hembras que hablaban idiomas distintos), sino sólo deseo y perversión. Instintivamente mi mano se dirigió a mi animal, obviamente este se había firmes y con la otra me deslice el pijama hasta el suelo. Con las dos manos empapadas en saliva que deje caer, forme una concha y me empecé a masturbar ferozmente mientras los primeros rayos del sol entraban ya por la ventana dejándome totalmente expuesto. Loco de caliente, ...