yo y mi madre - Relatos Eróticos

yo y mi madre

... viejo seguramente media lo mismo, de los otros dos su estatura era más baja uno media seguramente.1 75 y el otro 1.70. Mientras camina y me tomaba por los brazos sentí como ese inmundo a****l iba respirando mi cuello, me dio asco.Nos aventaron a la cama y nos contemplaron como si fuéramos dos pedazos de carne ante lobos y le dijeron a mi madre.- Señora más vale que nos de todas las pertenencias valiosas que tenga. O digamos que no saldrán muy bien de aquí.Mi madre enseguida lloro y dijo que les daría todo lo que quisieran (gran error) le dijo que todo lo tenía en la planta baja, así que el más viejo apuntándonos nos dijo. - Entonces vamos allá abajo Al llegar a la planta baja uno de ellos me tomo de los pelos y me aventó al sofá, solo escuche a mi madre gritar que no me lastimaran antes de que el más viejo le diera una cachetada que la tumbo en el suelo en ese momento empecé llorar, uno de ellos patio una silla de madera, rompiéndola al instante en ese momento grito. -Cállate puta zorra pendeja.Entonces el más viejo explico. -Mire señora, hace un tiempo que vimos a su hija salir del colegio, y fue tanta nuestra excitación que tuvimos que seguirla, aunque después de verla debemos decirle que usted no se quedó atrás, fue parte de mis fantasías eróticas por días. Creí que era su hermana, mayúscula mi sorpresa al saber que era su madre, así que mayor fue mi lujuria.A lo que mi madre replico.- Malditos desgraciados como lograron entrarAl que ese infeliz contesto.- Jajaja pero si ...

... usted puta barata nos dejó entrar, ayer al momento de ir por el dinero para pagar al joven de la carne dejo abierto así que éntre los cuatro nos ingeniamos para poder distraer al chico en lo que uno se metía rápidamente, de modo que marco (el hombre de 1.75) durmió aquí con ustedes. Ya solo en la mañana busco una copia de la llave para abrir y dejarnos entrar de ese modo no creo sospechas.A lo que el otro tipo de 1.88 dijo.- Así que como vera lo que buscamos no es dinero sino placer, un placer que ustedes nos blindaran.Mi madre se negó casi llorando. Pero Marco (si es que era su nombre) rápidamente se abalanzo sobre mi madre que aun estaba en el suelo y la despojo de su saco para agarrar sus senos con fuerza a lo que mi madre deprisa se intentó levantar, esfuerzo que fue nulo pues el más viejo le dijo.- Si no copera le volare la cabeza a su muñequita (haciendo referencia a mí).Mi madre casi llorando en silencio se dejó tocar por ese desgraciado. Mientras este le estrujaba las tetas y casi levantándola de las tetas la hizo caminar hasta el sofá donde él se sentó y mi madre encima de él, mi madre pidió que por lo menos me dejaran ir a un cuarto para no ver nada. A lo que el joven de 1.88 dijo.- Que no nos escuchó pendeja? Su hija será el centro de atracción en unos minutos.Eso me helo la sangre. Marco le dijo a el de un 1.70.- Empieza a desvestir a esta golfa Martin.Mi madre vestía medias negras, falda negra un poco arriba de la rodilla y hasta arriba del ombligo y una blusa ...