1. El Reto pepsi


    Fecha: 08/09/2018, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... una máquina, unas toallas, unas tijeras, una bolsa de agua y crema de afeitar de mi esposa cuando entré a la habitación estaba sentada al borde de la cama con el vestido subido hasta sus caderas y tenía razón una cantidad enorme de vello le salía por los costados. Acuéstate y abre un poco las piernas que te voy a recortar con la tijera rebordeándote, la tanga no es necesario que te la quites. Le puse una toalla debajo de sus caderas y empecé a recortarle los pelillos que sobresalían, busqué una aspiradora manual para recoger todo lo que había cortado le pasé un poquito de crema y empecé a rasurarla. Cuando terminé le dije anda y lávate y dime cómo te queda. Se fue al baño mientras yo guardaba las cosas que había utilizado salió y me preguntó cómo te parece, yo estaba de espalda metiendo todo dentro del cajón del tocador, estaba sin tanga con el vestido subido y me dijo me parece que deberías cortarme un poquito más. O.K le dije acuéstate nuevamente, me acerqué y comencé a cortar, en ese momento mis ojos no podían salirse de sus labios vaginales de un color rosado y algo brillante, sin querer rocé uno de sus labios e inmediatamente ella brincó de la cama y le dije quédate quieta te puedo cortar, se lo repetí tres veces y mis dedos acariciaron al descuido su vagina, me acerqué para ver mi obra de peluquería y no pude resistir la tentación de pasar mi lengua sobre esos rosados labios brillantes que cada vez que la pasaba se ponían más brillantes y rosados, no dijo ni hizo ...
    ... absolutamente nada así que continúe, mi lengua empezó a introducirse y descubrí su clítoris que metí golosamente en mi boca en ese momento se me olvidó todo, hasta que ella era mi sobrina, le levanté las piernas sobre mis hombros y de rodillas al borde de la cama le empecé a chupar su vagina como un desenfrenado, le fui metiendo un dedo y con la otra mano me empecé a bajar mis pantalones cogí mi miembro masturbándome hasta alcanzar un volumen considerable. No me hice ordenar dos veces y empezó a levantar las caderas rítmicamente mientras mis dedos y mi mano derecha se hundían en su vagina. Le hice subirse más en la cama y le empecé a frotar la cabeza de mi verga en sus labios vaginales, ella se mordía para no gritar la calenté durante un par de minutos y de un golpe me atrajo hacia ella cerrando sus piernas en mi cintura y empecé a penetrarla centímetro a centímetro sintiendo como su vagina apretaba mi verga, cuando la tuvo toda adentro se la saqué y se la metí de un solo golpe, sus ojos se pusieron blancos y ella empezó a temblar se aferró a mí como si fuera un naufrago, su orgasmo fue violento y largo, lloraba y reía al mismo tiempo encontramos fácilmente el ritmo y acabamos juntos después de otros tres orgasmos por parte de ella. Me dejé caer de costado sobre la cama y le acaricié sus pezones con mi lengua y seguí acariciando su culo con las yemas de mis dedos, acariciando su vagina nuevamente le metí dos dedos mientras suavemente le empecé a meter un dedo en su culito virgen, ...