1. (9) Reflexiones sin bragas


    Fecha: 12/09/2018, Categorías: Lesbianas Sexualidad, Autor: Mister Neron, Fuente: CuentoRelatos

    1 El calor veraniego de junio llegó por la tarde como un vendaval abrasador. De ahí que Ana y su amiga Ainhoa Montes se pasaran por la heladería Kalua a tomarse algo fresco. En el caso de Ana un te helado y Ainhoa un mojito con mucha nata por encima. Se sentaron en la terraza bajo una sombrilla y disfrutando del momento. -Aquí se está de puta madre –garantizó Ainhoa-. Mejor que en la cama follando –carcajeó-. Hey, ¿no te has dado cuenta? -¿De qué? -Aquellos tres maromos de esa mesa nos follan con la mirada. -No sé, a mi me apetece esta tarde un chocho. Ya me comí unas cuantas pollas esta mañana. -¿Otra vez Darío y sus amigos? -Los mismos. -¿A cuántos amigos se trajo esta vez? -Cuatro. -¿Cómo dices? ¿Te follaste a Darío y a sus cuatro amigos? -Como una campeona. Luego tuve que pasar la fregona. Iban chorreando por todos lados los muy guarros. -¡Joder! Qué envidia me das, perra. -Dos de ellos quisieron repetir y cumplí como una puta. -¡Choca! -¡Yeah! –se dieron una chocada-. ¿Te has fijado en la camarera? Está rica de cojones. -¿Cuál? -Esa que se pavonea como una zorra. -Wow, debe ser nueva. No la conozco. -Ahora mismo vamos a salir de dudas. ¡Camarera, por favor! La camarera no tardó ni un segundo en acercarse. -Vaya, encima sumisa. Me gusta –susurró Ana aguantando la carcajada. -Hola, ¿os falta algo? -Sí, tú –endulzó Ana la voz. -Yo no estoy en el menú –rió la camarera. -Ohhh, qué pena. ¿Y no puedes hacer una excepción con nosotras? -Os lo agradezco, pero estoy trabajando. ...
    ... Si ve mi jefe que me distraigo o me entretengo me ficha. -¿Eres nueva aquí? -Sí, solo llevo dos días. -¿Cómo te llamas? Yo soy Ana. -Yo Ingrid. -Ah, qué nombre tan bonito. ¿Y tu edad? -23 años recién cumplidos. -Yo 22 y ella 21. Somos las más folloneras de la facultad de medicina. -Sí, ya se nota. -¿Se nota tanto? -Sois las más guapas de la heladería ahora mismo. Todos os devoran con los ojos. -Yo también te devoro con los ojos. -Gracias, Ana. -Eres una monería de niña. ¿Te puedo hacer una pregunta íntima? -Prueba. -¿Tienes novio o novia? -No, que va, estoy soltera. -¿Cuándo fue tu última relación sexual? -Buff, ya ni me acuerdo. -O sea, que usas la mano. -La verdad es que sí. -¿Y te gustaría echar un polvazo? -A ser posible sí. -Te hago mejor la pregunta. ¿Y te gustaría echar un polvazo conmigo? -Me encantaría. Eres súper guapa. -Y súper puta –añadió Ainhoa. -Cállate, so zorra, no podía callarse. -No me importa, Ana, de verdad. -¿Te gusta que yo sea una súper puta? -Me gusta mucho. Bufff qué calores me han entrado de repente… -Y a mí bufff eso debe ser las feromonas en ebullición. -Ana, acabo en dos horas. ¿Quedamos aquí y nos vamos a mi casa? -No sé, es mucho tiempo y yo necesito follarte ahora mismo. -¿Y dónde lo hacemos? -Ainhoa, espérame aquí. -Vale. -Ana, te lo he dicho, estoy trabajando. -No seas nenaza –la cogió Ana de la mano y tiró de ella con ternura. -¿A dónde vamos? -Confía en tu putita. -No debo, Ana. Me juego el puesto de trabajo. -Y yo me juego el polvo de la ...
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