1. Ana y una tarde entretenida en el sex-shop


    Fecha: 22/09/2018, Categorías: Anal Voyerismo Sexo en Grupo Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster

    Ana y una tarde entretenida en el sex-shopAl poco tiempo de casarnos, Ana me comentó una noche mientras cogíamos, que deseaba comprar unos juguetes eróticos para condimentar un poco nuestros juegos previos en la cama… o fuera de ella.Buscamos un sex-shop en el centro de la ciudad; un lugar de lo más vulgar.Cuando llegamos al segundo piso, Ana sonrió con su mejor cara de perra:"Lo que pase aquí hoy, ya te va a tocar verlo en vivo". Eso significaba que, en el caso de que el lugar tuviera cabinas, ella pensaba entrar en alguna con algún desconocido que quisiera pasar un buen momento…Ese comentario me volvió loco, mi verga saltó dentro de mis pantalones.Decidimos entonces que entrara yo primero y ella llegara después, como si fuésemos desconocidos, para agregarle más fuego a nuestra fantasía.Entonces entré, encontrando a media docena de hombres, incluyendo al dueño detrás del mostrador. Me dirigí a la sección de los videos y comencé a mirar todo lo que había allí.Unos instantes después entró Anita y todas las miradas hambrientas se dirigieron hacia ella. Era difícil no registrarla; llevaba una falda corta, una blusa atada con un nudo a la cintura, mostrando sus caderas al aire, sandalias de taco alto y sus cabellos rubios atados en una cola, que le daba un aire angelical y de puta barata al mismo tiempo,Ana le devolvió la mirada a cada uno y caminó recorriendo la tienda, mientras echaba miradas calientes a cada uno de sus posibles depredadores. Se lamía los labios sacando la ...
    ... lengua y acariciaba la punta de los consoladores mientras miraba fijamente a esos tipos a los ojos.La tienda tenía efectivamente una sección de cabinas, donde se proyectaban películas cortas y algunos pajeros se encerraban a masturbarse mientras las miraban.Mi mujer eligió un video de sexo anal y se dirigió al mostrador, donde le preguntó al dueño, mientras se mordía el labio, si tenía cabinas disponibles.El tipo le señaló al fondo, diciendo que podía utilizar la cabina número 2.Ana volvió a morderse el labio y luego caminó muy despacio, contoneando sus redondas caderas hasta el fondo. Todas las miradas masculinas siguieron sus movimientos. Al final se detuvo y se desprendió la diminuta pollera, mostrando a todo el mundo sus firmes nalgas desnudas, ya que no llevaba puesta ni siquiera una tanga.Miró hacia atrás y luego entró a la cabina, dejando la puerta abierta.En ese momento todos entendieron la indirecta, pero solamente tres de los tipos se animaron a acercarse a la cabina número 2.Yo me moví detrás de ellos, dispuesto a presenciar la acción y asistir a mi mujercita por si las cosas se ponían muy pesadas…La sorpresa para todos fue que Ana estaba esperando recargada sobre la entrada de la cabina y al llegar el primero de los hombres lo tomó por el cuello y lo arrastró hacia adentro, cerrando luego la puerta.A pesar de que las paredes se veían bastante gruesas, se podía oír los gemidos y aullidos que dejaba escapar Ana, mientras el primer tipo la cogíaDiez minutos después se ...
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