MATRIARCADO (El reencuentro 1°) - Relatos Eróticos

MATRIARCADO (El reencuentro 1°)

Teníamos más de 2 meses sin tener contacto con mis cuñadas como lo era cuando vivía mi suegra... Después de la muerte de mi suegra nos quedamos solos Carla mi mujer y yo. Como ya les había comentado, ella se encontraba muy delicada y murió. Después del velorio regresamos a casa un rato, menos la mayor que vivió con nosotros, ya ni para despedirse, pero eso sí, bien cogida y por la noche se despidieron Cuquis y Cesy. Lo primero que pensé fue que ya no volvería a estar con ellas, pero después de varios días llegaron de visita y me dio mucho gusto verlas. Aún de negro se veían muy antojables, imaginaba si hasta su ropa íntima sería negra… En las primeras semanas no hubo siquiera algún comentario o indirecta, venían de vez en cuando a saludar y tomar la copa o un café. Pero después de 2 o 3 meses, aunque venían seguido, quedé sorprendido un día que fueron de visita, porque cuando al abrir la puerta, lo primero que me preguntaron ambas con una hermosa sonrisa en su boca fue, que si Carla su hermana estaba cerca, las pasé al hall y les dije que estaba en el baño y antes de que mi mujer saliera me saludaron cada una con un rico beso en la boca… fui sorprendido pero rápidamente les correspondí… Qué bueno que vinieron, les dije en voz alta, pásenle… y en voz baja… no saben cómo las extraño linduras… a lo que me respondieron…nosotras también… Queríamos que pasara un tiempo, ya que no se nos hacía oportuno venir, pero aquí estamos y ya nos veremos más seguido… se voltearon a ver y se ...

... sonrieron… al pasar Cesy junto a mí, me pasó sus dedos por mis labios, limpiándome la pintura que habían dejado y luego se lo llevó a la boca en el momento en que me daba la espalda… Mi mujer les dio la bienvenida y pasaron a la sala. Ya tenía más de 2 meses sin estar con alguna de ellas y esta visita me ilusionó… Les ofrecí algo de tomar y aceptaron, levantándose Cuquis a ayudarme, a lo que mi mujer no se opuso. Ya en la cocina la tomé por la cintura y comencé a besarle el cuello… recargó sus nalgas en mi verga y comenzó a restregármelas… suspiró profundamente y volteándose me puso sus brazos en el cuello y me dio un dulce beso y muy quedamente me dijo al oído… ya nos pondremos de acuerdo para vernos, no creas que no tenemos ganas de estar contigo…te llamaremos, ya lo verás y volvió a besarme… tomamos los vasos, el refresco y regresamos a la sala. Las dejé platicando y me fui a mi despacho, ya no dormía ahí desde que se fue mi suegra, pero estaba tal cual. Pasaron como 10 días, durante los cuáles me imaginaba nuevamente cogiendo con ellas… tan ricas, tiernas y golosas y por fin recibí la llamada que tanto estaba esperando… .- Hooola, como te va… .- Hola, que hermosa sorpresa Cuquis .- Pues ya ves, en eso quedamos ¿o no?... .- Si y me da mucho gusto recibir tu llamada… .- Y a mí hablar contigo… .- Ya quiero verlas y estar con ustedes… .- Nosotras también y para eso te hablo, para ponernos de acuerdo… .- Como ya Carla y tu están solos, nos pusimos de acuerdo Cesy y yo en que, ...