1. Nada es lo que parece


    Fecha: 05/10/2018, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Mi nombre es Antonio tengo 21 años y esto que paso a contarles sucedió hace un par de semanas. Lo primero es describirme. Mido 1´70 soy moreno delgado y fibroso y mi polla no es tan grande como la del resto de los que aquí escribe. No se si sentirme acomplejado o es que hay mucho fantasioso. Vivo en Madrid con mis padres y mi hermano. Desde que mis hormonas despertaron siempre fantaseaba con mi tía, la hermana de mi madre, a la cual he dedicado muchas pajas. La relación con ella era bastante buena pero nunca pensé que podría tener algo con ella, ni siquiera un polvo rápido. He de reconocer que ella a diferencia de mi madre se conservaba muy bien, grandes tetas, un culo firme, media melena rizada y no se porque pensaba que debía ser una furia en la cama. Mis miradas hacia ella eran total mente descaradas, pero aun así no había conseguido nada. Pero para sorpresa mía se ve que si causaron efecto en ella por que hace un par de semanas mi madre, aprovechando que mi padre estaba trabajando, me llamo a la cocina para hablar conmigo. Yo baje tranquilo suponiendo que me pediría que fuese a por tabaco o le bajase algo de la estantería de arriba. Pero cual fue mi sorpresa cuando me hizo sentar y me dice en tono mas o menos molesto: He hablado con tu tía y dice que no quiere venir a comer mañana a casa por que la haces sentir molesta. ¿Tienes algo que decirme al respecto? Yo me quede alucinado y sin saber que respondí medio balbucee ¿a que te refieres? Ella me dijo que no me hiciese ...
    ... el tonto que sabia a que se refería y que por que miraba a mi tía como si fuese "la única mujer en el mundo", palabras textuales. Yo estaba sorprendido no solo mi tía si se había dado cuenta de mis miradas sino que se creía que era la única mujer del mundo para mi, algo exagerado. Yo le dije que no era para tanto que la habría mirado alguna vez pero sin exagerar. Mi relación con mi madre no es de lo mas agradable, lo mas común es que ni nos hablemos y si lo hacemos es para discutir. Yo ya sabía como iba a acabar la cosa. Después de un silencio que rompí con un "y si la miro que" mi madre me dijo que si deseaba tirármela. La conversación tomo un tono bastante fuerte, y yo la respondí con sinceridad pero queriendo molestarla que si se daba la ocasión no me lo pensaría. La respuesta de mi madre no fue otra que "¿te parecería bien que yo me acostase con tu primo?" a lo que respondí que me daría igual aunque dudaría que ella fuese tan liberal, puesto que parecía que vivía en los años 50. Esto debió molestarla en demasía puesto que lo que dijo ya me descuadro por completo. Pues conforme esta la relación con tu padre a lo mejor me "follo", palabra que nunca había escuchado salir de su boca, a tu primo. Impresionado le dije que cuando lo hiciese que me avisara para verlo porque ella era una reprimida que no seria capaz de hacerlo. Su respuesta fue un "cuando quieras te demuestro lo equivocado que estas". La conversación ya no era tal eran solo gritos pero reconozco el imaginarme a mi ...
«123»