1. Para Mac , mi delirio


    Fecha: 07/10/2018, Categorías: Sexo con Maduras Tabú Autor: pepitito, Fuente: xHamster

    Amor, los recuerdos me atormentan de pasión y me repito más de una vez porque no estoy a tu lado todavía? Esta espera de horas me vuelve loco.¿Acaso crees que eres la única que domina sus deseos? Yo también resoplo por dentro en una mezcla de dolor e impaciencia cuando recuerdo algunas cosas que me has dado y que pronto me darás. Mi vida, tienes en tu vagina el sabor más rico, la textura más suave, el aroma embriagador y el calor que mi boca saborea junto a tus contracciones cuando te hago alcanzar el cielo y juntos vamos a ese destino de amor y de goce. Ese mundo donde no existe nadie más que nosotros alcanzando la dicha suprema de nuestros deseos satisfechos. Ese mundo donde me llenas de bienestar, complaces mis apetitos y me colmas felicidad haciéndome un hombre afortunado. Hoy voy a decirte cuanto me gusta comer tu sexo.Cada vez que nos encontramos, mi cuerpo todo se resume en esa lengua afortunada que resbala por tu cuerpo, y que camina el bendito trayecto que separan tus labios del ansiado vértice. Tengo que empezar a desnudarte, pero previamente fundirme en un abrazo y un beso donde tu lengua y la mía se encuentren con pasión.Es apasionante ir desnudándonos mutuamente, sentir el tacto de la piel en nuestras manos, e ir escuchando como nuestros cuerpos van acercándose apasionadamente a lo que tanto deseamos.Tendré que ser más trasgresor, porque así también me siento cuando deseo beberte entera, sacar tus sabrosos jugos con mi lengua, luchando con esos pliegues y ...
    ... huecos de tu vulva que se resisten a entregarme ese licor del cielo que busco con afán. Quiero tener el tacto, la constancia y la entrega necesaria para que comprendas cuanto amo que viertas sobre mí, tú tibio líquido en mi garganta. Al ir tragándolo siento más cerca mi alma de la tuya.Es un ritual mágico ir bajando por tu cuerpo y abrir lentamente tu flor como si fuera separando pétalos para llegar a la miel. Primero lo beso, está suave, desprende un olor cálido que hace que mis sentidos se anulen, pero una nulidad mágica, mi olfato solo huele a tu sexo, esa mezcla de miel agridulce y rico néctar.Voy a ir pasando mi lengua cerca de tu clítoris que tiene una textura que invita a mantenerlo en mi boca con toques mínimos de mi lengua. Ahí empiezo a escuchar la sinfonía de tus gemidos acompañando mis lametones. Aún no voy a hacer hincapié en esa zona, solo voy apoyando mi cara sobre tus muslos y pese a que aun no te toco sientes el paso de mi lengua por tu sexo. Se están abriendo las puertas del placer y tú estás caminando al ritmo preciso para llegar al mismo.Lamo tus muslos, acaricio tus glúteos encajando simétricamente mis brazos por la parte de atrás de tus piernas así podré hacer más presión para atraerte hacia mí. Dejaré mis brazos aparcados y tú ayudaras con tu arqueo vertebral el pasaje de mis manos por tu parte trasera. Los dos nos volvemos locos por empezar lo que queremos que nunca se termine, pero me doy cuenta que he vuelto sobre mis pasos y tengo mi cara cerca de tus ...
«123»