1. Año nuevo, pija nueva


    Fecha: 11/10/2018, Categorías: Infidelidad Autor: ámbar coneja, Fuente: CuentoRelatos

    ... concha se me prendía fuego de tantos jugos goteando en mi bombacha. Ahora veía que las dos se besaban y se tocaban las tetas mamando sin importarles de quién era la pija de cuál. ¡vení Pame, dame tetita pendeja, te las quiero chupar!, dijo Sofi luego de separarla de los pibes y recostarla en la cama revuelta. Sofía le lamía las tetas y le colaba algunos deditos en la concha mientras Javier, aprovechándola inclinada y laboriosa le mete la pija sin previo aviso en la conchita para garcharla con todo. ¡así guacho, cógeme toda, te tenía unas ganas, ponémela toda perro, haceme tu putita, y después quiero que te cojas a Pame!, decía Sofi con su boca inexpugnable en las tetas de Pamela, a quien ahora no le quedaba más alternativa que chuparle la pija a su novio que estaba parado junto a su cara. El olor a sexo, a sudor y a fluidos que emanaba esa habitación era rescoldo para los ratones de mis ojos entusiasmados, pero en mi interior querría que esto solo fuese un sueño, un mal trago o una fatalidad de la que pudiéramos hablar al día siguiente y resolverlo. Pero no iba a negar que me excitaba ver a mis hijas hechas unas putas, y a sus novios con semejantes porongas haciéndolas felices. Cuando Guille alzó en sus brazos a Sofía y se la sentó en las piernas creí que estallaría un escándalo. ¡dale guacho, enseñame cómo te cogés a mi hermanita, y obligala a que te chupe, pegale, hacele tragar la lechita a la fuerza boludo, pero que te la mame, y vos chupale la concha!, decía Sofía ...
    ... mientras Guille le daba cada vez más rápido por la conchita marcándole los dedos en sus pechos. Entretanto, en la cama Javier le chupaba la vagina a Pamela y ella le comía el pito en un 69 que los hacía rodar, pegarse, olerse arañarse cuando estaban al borde de acabar. En ese preciso instante, justo cuando Sofía gemía haciendo que se oiga el choque de su cola en las piernas de Guille, siento una mano en el hombro y otra en mi cintura. ¡qué andás mirando cochina? Te gusta ver cómo cogen tus guachas?, y pensar que para mí ni se saben lavar las bombachas!, detonó la voz de Claudio en mis oídos con su aliento tan alcohólico como cauteloso. No pude hablarle. Dejé que me lleve a la habitación de Pamela mientras me comía la boca diciéndome que me tiene ganas hace años. Me tira sobre la cama, me sube el vestido, hace a un lado la parte de delante de mi bombacha y me muestra una pija con una erección que no imaginaba que pudiera entrarle a ninguna concha humana. No me tuvo piedad. Se me trepó y me la metió sin preámbulos al tiempo que me chupaba las gomas desnudas, y me hacía oler la tanguita que Sofía se había quitado en el living. ¡cómo cogen tus hijas flaca, pero vos cogés mejor seguro putona, sentila toda, imaginate a Sofi y a Pame cogiéndose en la camita mientras yo y los boludos esos las llenamos de leche!, me decía envistiendo mi vagina con brusquedad, haciendo que su pija crezca y se ensanche aún más entre mis jugos. Hasta me rompió la bombacha el muy bruto! Sentía que podía morirme ...