Una casa de locos
Fecha: 28/10/2018,
Categorías:
Incesto
Sexo con Maduras
Autor: xavimysk, Fuente: CuentoRelatos
... tácito por el que los tres nos alternábamos para llevar el ritmo. Cuando era mi padre quien follaba el coño de mamá yo aguantaba la posición, mientras que cuando era yo quien jodía el su culo papá aguantaba sin moverse demasiado. De esta forma conseguimos mantener nuestras pollas enterradas dentro de mi madre sin mayor contratiempo y solo cuando era ella la que marcaba el ritmo nuestras vergas entraban y salían a un mismo tiempo. Aquella debió ser la escena familiar más guarra que jamás se halla dado. Nuestros gemidos se entremezclaban sin que ninguno intentásemos ahogarlos en ningún momento. Por mi parte follaba a mi madre al más puro estilo canino y a toda velocidad, mi padre también se aplicaba en lo que a velocidad se refiere mientras que mamá tenía un estilo más lento pero profundo. Fue durante mi turno cuando, follando su culo a toda pastilla y excitado por los continuos gemidos que escapaban de su boca mientras lo hacía, sentí que no podía más. Me corría y ni quería ni podía vitarlo. -Me voy a correrrrrr mamá… me corroooo. -Si nene, correteé, lléname el culo de leche, llénamelo que me corro yo también ummmm. Comencé a correrme con tanta fuerza dentro del culo de mamá que incluso sentí una pequeña punzada de dolor al salir el semen a borbotones por la punta de mi polla. -Sí te siento cariño, te siento, me corro me corro yo también aghhh. Dicho y hecho, el culo de mamá comenzó a contraerse violentamente estrujando mi polla y sin duda su coño acompaño en la jugada pues ...
... papá se nos unió en pocos segundos. -Joderrr, tu coño, como me ordeña la polla, como me aprietaaaa, me corro, me corro yo también uffff. -Ahhh. -Ummm. Fue un auténtico concierto de gemidos en el que los tres perdimos cualquier tipo de control sobre nuestros cuerpos. Mamá cayó derrumbada entre temblores sobre el cuerpo de mi padre acompañándola yo detrás en lo que fue un abrazo a tres que perduro durante varios minutos en los que intentábamos recobrar la respiración. Finalmente rodé a un lado quedando tumbado boca arriba en la cama siguiéndome mamá algunos segundos después. Los tres estábamos tumbados en la cama boca arriba, mirando al techo con mi madre en el medio. Tras unos minutos me gire y la bese tiernamente en la mejilla, ella se volvió hacia mí correspondiendo el beso con otro, pero esta vez en la boca. Mi padre hizo lo mismo y tras besarla también en la mejilla obtuvo igual respuesta por su parte. Todo la acción de hacía unos minutos había devenido en una calma total. Mi padre llevo su mano hasta el coño de mamá y tras introducir sus dedos y recoger la mezcla de sémenes que emanaba de él llevo su mano a la boca de mamá que comenzó a lamer y besar sus dedos hasta dejarlos totalmente limpios. -¿Eres feliz?- Le pregunto él con una sonrisa. -Sí- contesto ella que poco después se giró en mi dirección y me ofreció su boca en un cálido beso que no pude rechazar. No recuerdo mucho más, solo que una gran sensación de relax me invadió por completo. Ni tan solo se cuándo ni cómo ...