1. Sus tacones se enterraron en mi


    Fecha: 11/11/2018, Categorías: Fetichismo Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... mi pene y lo aplastó con su pie izquierdo, estuvo así aproximadamente 15 minutos hasta que no aguanté más y me corrí abundantemente. Posteriormente mi mujer se quitó su tanga y me dijo: ahora me toca a mi, dicho esto, se sentó lentamente sobre mi cara, colocando sus labios vaginales en los míos y los pasaba por mi cara, gemía y presionaba mi boca con su vagina hasta que al fin con un gran espasmo se corrió en mi cara, depositando sus sabrosos jugos en mi boca los cuales me tragué con gusto. Seguimos haciendo nuestra rutina una vez a la semana(los sábados) durante mes y medio, siempre descalza. El sábado de mi cumpleaños(mes y medio después), venía yo del supermercado ya que había ido a comprar cervezas y algo para picar en casa cuando al llegar a casa me llama miujer desde la habitación, al llegar casi me voy de espaldas cuando la vi, completamente desnuda a excepción del calzado: los preciosos mules que le había regalado, sus uñas pintadas de rojo. Me dijo con una voz firme: te tengo tu regalo de cumpleaños, desvistete y tumbate boca arriba!!. Empezando a empalmarme hice lo que me pedía lo más rápido posible. Ella se acercó a mi, apoyándose en su tocador levantó su pie derecho y lo posó en mi abdomen, apoyando su peso en la suela subió su otro pie y se paró en mi abdomen. Con un poco de duda empezó a hundir su tacón izquierdo y al ver que resistía apoyó todo su peso. Alternaba cada uno de los tacones y al rato ya pisaba diferentes partes de mi abdomen. En un momento ...
    ... determinado avanzó hacia mi pecho, se apoyó con la suela en ambos pectorales hasta que finalmente empezó a hundir sus tacones. Era un dolor muy fuerte, se me entrecortaba la respiración, pero estaba a mil, ella viendo cuidadosamente colocó cada tacón en mis pezones y empezó lentamente a hundirlos. El dolor aumentaba y yo hacía alguna mueca de dolor, lo que parecía que a ella le divertía, ya que lo notaba en su rostro el cual tenía una risa de domina triunfal. Hacia presión leve y la relajaba, en una de esas descargó todo su peso y sus tacones se hundieron en mis pobres y aplastados pezones lo que inmediatamente me arrancó un alarido de dolor y a ella una suave carcajada, y me dijo: -que le pasa a mi osito? Que le está haciendo esta mala mujer? Acto seguido levantó la suela del mule derecho dejando sólo apoyado su tacón en mi pezón y giró su pie a uno y otro lado...el grio fue un poco más fuerte y simultáneamente tuve la corrida más grande que he tenido en mi vida.. Pero la cosa no terminó ahí, posteriormente como hacia siempre, se sentó en mi cara, sólo que esta vez colocó directamente su culo en mi boca y me dijo: lame! Y yo empece a lamer y a introducir mi lengua lo más profundo que podía, era un sabor entre dulzón y amargo, un olor indescriptiblemente sabroso que paulatinamente me fue empalmando nuevamente, ella me cabalgaba y alternaba su vagina y su culo en mi boca hasta qu no pudo más, vinieron los espasmos y plantó su culo en mi boca, apretándolo me soltó un pedo y se ...